Luego de años de abusos sexuales a 4 de las 5 hermanas y dos años de la denuncia, se logró hacer justicia, sin embargo el hombre es muy mayor para cumplir la condena tras las rejas y lo hará en su domicilio.
El hombre fue apodado como el chacal de Zapala y tras los testimonios de sus hijas se descubrió que las violaba porque él creía ser un enviado por Dios y la divinidad quería que él fuera el primer hombre de ellas.
En total tenía 11 hijos: 6 varones y 5 mujeres. Los abusos comenzaban una vez que las jóvenes tenían su primera menstruación, es decir a los 11 ó 12 años y se prolongaban hasta que ellas decidían abandonar la casa a los 17 años aproximadamente. A todas ellas las sacaba de la escuela para que no contaran lo que vivían. Las autoridades provinciales coprobaron que la menor de ellas no fue escolarizada.
La hermana del medio fue quién logró denunciar el hecho, quien en su momento no había entendido porqué sus dos hermanas más grandes se habían ido de la vivienda familiar hasta que le tocó vivir el infierno. Luego de algunos años de no soportarlo más en 2016, ella también se fue de su casa y tras hablar con sus hermanas mayores decidió hacer la denuncia en 2018 para batallar la custodia de las dos pequeñas que habían quedado al cuidado del violador. Lamentablemente sólo la más pequeña pudo ser salvada del horror.
Tras dos años de juicio, esta semana el hombre fue condenado a 20 años de prisión por el abuso a sus 3 hijas menores, ya que en el caso de las mayores las causas prescribieron. No obstante el hombre deberá pasar la condena en su casa, ya que al ser mayor de 70 años tiene el privilegio de la prisión domiciliaria.
La denunciante sintió cierta satisfacción, ya que su padre fue condenado en unanimidad por mujeres, lo cual significó una humillación doble para él, puesto que por años el hombre le dijo a sus hijas que las mujeres no servían para nada. Actualmente sus hijas mayores tienen 23, 20 y 15 años.