Había sido convertida en un hotel pero tuvieron que cerrar por la pandemia y no pueden sostenerlo más.
La casa de Chascomús en la que vivió el expresidente Raúl Alfonsín y su familia está a la venta. Había sido adquirida por el empresario Matías Andia hace tres años y convertida en hotel museo, pero la crisis económica por la pandemia, que golpeó fuerte al sector turístico, lo obligó a tener que tomar esta dura decisión.
«Si.. vendemos La Casona, esta increíble casa, con tanta historia, hogar de una de las personas más emblemáticas de nuestro país, cuna de la historia Argentina, patrimonio histórico sin dudas. Cuantas anécdotas vividas, cuantos huéspedes, cuantos de ustedes estuvieron disfrutando de su tranquilidad, de sus increíbles espacios y ojalá de nuestra compañía», escribió el dueño en las redes sociales del hotel para informar la noticia.
Y continuó: «Fueron tres inolvidables años, aprendiendo día a día, realizando este nuestro sueño. Disfrutamos cada desayuno, cada charla. Cada huésped que venía era una historia, una experiencia y una nueva anécdota en nuestras vidas. La Casona se vende, ojalá quien la compre la valore tanto como nosotros, esta casa siempre será la casa donde vivió Raul Alfonsín».
El empresario justificó la decisión explicando que «la situación es difícil» y aseguró que venderla es lo mejor que pueden hacer en este momento.
«La Casona», ubicada en Lavalle 277, tiene 430 metros cuadrados, 8 ambientes y una cochera. En 2010, al año siguiente de la muerte del «padre de la democracia», fue declarada «Edificio de Valor Patrimonial» por la Ordenanza Municipal nº 4290/10. Por eso, está eximida de algunos impuestos municipales, pero se prohíbe modificar su fachada, por ser parte del casco histórico de la ciudad.
El inmueble está tasado en 340 mil dólares. Un dato curioso, es que la inmobiliaria a cargo de la operación pertenece a familiares de Cecilia Plorutti, la esposa del exmandatario.En 1910, este edificio era un hotel manejado por un grupo de hermanos de apellido Cervera, oriundos de España. Durante 47 años, esta familia de catalanes hospedó a muchísimos inmigrantes y vecinos que llegaban a la ciudad.La familia Alfonsín lo compró en 1957, cuando el líder radical era concejal, y se instaló allí junto a su esposa y sus seis hijos. En esa casa, montó su despacho de abogado, desarrolló su pasión por el periodismo y hasta realizó la fiesta de casamiento de su hija Ana María.
En 1972, Alfonsín decidió mudarse, ya que necesitaba dinero para costear la campaña política y, además, «cuando se fueron sus hijos, la casa les quedó enorme», contó el empresario dueño del lugar a Infobae.»Estamos tristes, pero desde marzo no tenemos ingresos y suponemos que, como este rubro nunca se habilitó, será el ultimo en volver a trabajar», reconoció Andia.
Y aseguró: «Al Estado no le costaría nada comprarla, lo harían en cualquier parte del mundo, porque no sé si habrá otra oportunidad que esta para hacerlo y convertirla en el museo. Lo que más deseo es que lo haga el Estado para que la casa siga teniendo las puertas abiertas».
Mientras tanto, la Comisión de Turismo de la Cámara de Diputados de la Nación dio dictamen este martes a un proyecto de ley, propuesto por el oficialismo, que promueve un plan de auxilio para el rubro turístico, ya que, al igual que Andia, hay miles de empresarios y trabajadores del sector que se vieron gravemente afectados por la pandemia.