Cuatro efectivos de la policía de la provincia de San Luis fueron separados este jueves de sus cargos por orden del titular de la fuerza, el comisario general Darío Neira, tras la difusión de un video en el que se ve a dos mujeres que fueron maltratadas y agredidas en una comisaría a la que habían ido para denunciar un caso de violencia de género.
Las imágenes, que se viralizaron en las últimas horas en las redes sociales, fueron tomadas con un teléfono celular por una de las dos mujeres, que había ido para acompañar a la otra en calidad de testigo a denunciar a su expareja. Sin embargo, la testigo terminó resistiendo ella misma los gritos y los empujones de los agentes que pretendían que dejara de grabar.
Pese al mal momento, la cámara no se apagó y también filmó el lamento de la denunciante cuando la sacan por la fuerza de la seccional. “Es terrible cómo maltratan a las mujeres en este lugar y uno que viene a hacer una denuncia por violencia de género”, se la escucha decir en el video.
Los separados son el jefe, el subjefe y dos oficiales que prestaban servicios en la comisaría 29° del barrio La Ribera, en la ciudad de Villa Mercedes, a 92 kilómetros de la capital puntana.
A través de un comunicado oficial de la fuerza, el jefe policial indicó que la medida se tomó basada en la “inobservancia del protocolo de asistencia a las víctimas de violencia de género”. Además precisó que a los cuatro efectivos involucrados no solamente se los pasó a disponibilidad sino que se les iniciaron también sumarios administrativos.
Unas horas antes del incidente, la hija de la denunciante había compartido en su perfil de Facebook la situación de riesgo que atravesaba su mamá. “Me siento obligada a escrachar a estos dos…Martín es la expareja de mi mamá, Andrea Orozco, siempre fue una persona violenta y su hijo igual”, escribió la joven.
Y advirtió: “Desde que se separaron lo único que ha hecho es maltratarla y amenazarla de muerte, vive con miedo. Miles de denuncias y la policía nada, nunca los vi actuar, porque hasta que no la maten no van a hacer nada”.
Unos 155 femicidios y 9 transfemicidios fueron cometidos entre enero y julio de este año en el país, según un informe del Observatorio de Femicidios en Argentina “Adriana Marisel Zambrano” que coordina la Asociación Civil La Casa del Encuentro, que además reveló que como consecuencia de los crímenes 175 hijas e hijos quedaron sin madre.
De acuerdo al informe elaborado sobre los hechos ocurridos entre el 1 de enero y el 31 de julio de este año, en 98 casos de los 164 registrados, el femicida era la pareja o la expareja de la víctima, mientras que en 19 casos, el asesino era un conocido o vecino, y en 14 fueron familiares. En cuanto al lugar del hecho, el informe resalta que en 101 casos los femicidios ocurrieron dentro de la vivienda de la víctima.
Según el Observatorio, como consecuencia directa de los femicidios, 175 hijas e hijos quedaron sin madre, y el 63 por ciento de ellos son menores de edad (109 casos), mientras que 6 mujeres estaban embarazadas al momento del femicidio.
Fuente: TN