Una familia usurpó la Capilla de la Estación Juárez Celman e instalaron desde un kiosko hasta un parripollo. A causa de ello, los oficios religiosos se celebran en la plaza.
El hecho ocurrió en la localidad de Juárez Celman, ubicada a 23 kilómetros al norte Córdoba Capital, donde hace tres años 230 familias tomaron el predio que está contiguo.
Tras una serie de negociaciones, las cuales contó con la mediación del cura, se logró alcanzar un acuerdo y se produjo el desalojo de los terrenos. Con el paso de las topadoras y al comprobarse que 74 familias se encontraban sin vivienda, el Gobierno acordó con 49 de ellas. No obstante, unas 25 personas permanecieron en el patio de la capilla.
Luego de tres años, en los cuales se llevaron adelante intensas gestiones, casi todos fueron abandonando el terreno que el cura párroco les prestó. Sin embargo, una familia de ocho integrantes optó por quedarse y usurpar la parroquia.
Actualmente, el lugar permanece cerrado con candados y durante estos años, de acuerdo al relato de la propia intendenta Myrian Prunotto, allí funcionó un kiosko, una casa de lencería y durante el último tiempo instalaron un parripollo.
A raíz de esta situación, en Juárez Celman no se realizan misas, mientras que las clases de catequesis, las comuniones o bautismos se deben realizar en la plaza.
A raíz de esta situación, en Juárez Celman no se realizan misas, mientras que las clases de catequesis, las comuniones o bautismos se deben realizar en la plaza.
Fuente: radiomitre
