El incendio de un supermercado chino en el barrio porteño de Palermo provocó la muerte de su dueña, una mujer de 39 años quien quedó atrapada entre las llamas que devoraron el local entero.
Fue en Avenida Córdoba al 5500, en el barrio de Palermo, Ciudad Autónoma de Buenos Aires, donde un supermercado chino sufrió un incendio que lo redujo a cenizas. Pero la mayor pérdida fue la humana, ya que dentro del local en llamas quedó atrapada la dueña, una mujer de nacionalidad china de 39 años, quien no logró escapar y falleció en el lugar.
Según relatan testigos, Nil, dueña del local, atendía en la caja cuando observó las llamas provenientes desde el fondo del negocio, por lo que procedió a abandonar el lugar junto con su hija de 15 años. Sin embargo, ya en la puerta, pensó en el dinero familiar, que estaba guardado en la última habitación, por lo que volvió a ingresar para tomarlo, cosa que logró, pero no pudo volver a salir.
El fuego había consumido la estructura, provocando su derrumbe y dejando atrapada a Nil en el lugar. Luego de más de dos horas de trabajo por parte del cuerpo de Bomberos de la Ciudad, constataron que el cuerpo de la dueña del negocio se encontraba calcinado bajo casi dos metros de escombros de lo que fue el supermercado chino.
Ante la desesperación, familiares de la víctima quisieron acceder al local en llamas para rescatar a su ser querido, aunque ya era demasiado tarde y el ingreso al edificio habría significado más muertes en el lugar, ya que la estructura estaba a punto de ceder por las llamas, lo que finalmente terminó sucediendo.
Testigos relataron como la hija de 15 años de la dueña del supermercado, ante la desesperación, exclamaba: “¡Mi mamá está adentro, sáquenla de ahí! ¡Mi mamá está adentro!”, en lo que fue una escena estremecedora para los agentes de policía, bomberos y transeúntes que se encontraban en el lugar.
En el lugar trabajaron más de 10 ambulancias y permaneció el helicóptero del SAME para asistir a quienes fueron afectados por el humo. En total, siete personas fueron trasladadas –en su mayoría familiares que se descompensaron ante la noticia del fallecimiento de Nil- a los hospitales Fernández y Tornú.