
El reportero gráfico Pablo Grillo recibió el impacto de un cartucho de gas lacrimógeno que disparó la Policía Federal y sufrió una fractura de cráneo. En un primer momento, fue asistido por colegas que se encontraban en el lugar y, luego, lo trasladaron de urgencia al Hospital Ramos Mejía, donde permanece internado en grave estado.
Grillo estaba ubicado a metros del edificio del Anexo del Senado, en las intermediaciones del Congreso. Mientras intentaba capturar imágenes del momento, recibió el impacto del tubo de gas lacrimógeno y cayó al piso.
Fabián Grillo, padre del fotógrafo herido, declaró a los medios que “estaba trabajando de forma independiente” cuando recibió el impacto y que tras ser operado su estado es crítico. Grillo, además de fotógrafo, es empleado del Concejo Deliberante de Lomas de Zamora.
