El brote de Covid-19 se produjo en las últimas semanas. Se infectaron pacientes y personal de salud del establecimiento, donde se verificó una serie de irregularidades y el incumplimiento de los protocolos sanitarios. A partir del 2 de mayo comenzará a funcionar bajo la gestión municipal de la localidad bonaerense de Belén de Escobar.
El intendente de Escobar, Ariel Sujarchuk, firmó este viernes el traspaso a la órbita municipal de la clínica privada San Carlos tras detectarse allí un brote de coronavirus, que se sumó a varias denuncias por irregularidades en su gestión cotidiana. El video de un hombre, que busca con desesperación su padre allí internado, se viralizó en las redes sociales y dejó en evidencia el estado de abandono en el que se encontraban los pacientes.
Si bien las negociaciones para adquirir el centro de salud, ubicado en la localidad de Maquinista Savio, habían comenzado a fines del 2019, en las últimas semanas se detectaron 23 casos de coronavirus, entre pacientes y personal de salud, por la falta de cumplimiento de los protocolos sanitarios de parte de sus autoridades. Allí también murió un hombre de 84 años que había sido internado a principios de abril por problemas cardíacos.
La clínica, que cuenta con 250 trabajadores, presta atención a unas 22 mil personas, en su mayoría adultos mayores provenientes de PAMI. Se trata de la clínica más grande de la 5ª sección sanitaria, ubicada al noreste de la provincia. Por volumen de población es la segunda en importancia y está compuesta por los municipios de Campana, Escobar, Exaltación de la Cruz, General San Martín, José C. Paz, Malvinas Argentinas, Pilar, San Fernando, San Isidro, San Miguel, Tigre, Vicente López y Zárate.
Ante esta situación, la Municipalidad decidió intervenir en conjunto con el PAMI y el Ministerio de Salud bonaerense para cerrar y obtener inmediatamente la titularidad de la clínica privada.
Según explicó el intendente Sujarchuk a Infobae, las negociaciones habían empezado a fines de 2019 luego de que los dueños de la clínica expresaran su interés en venderla. En principio, el plan era tomar la operación de la clínica a principios de abril pero antes explotó la crisis de la pandemia. En marzo, el Concejo Deliberante había autorizado al intendente a firmar un “acuerdo macro” para su adquisición.
“Cuando empezó la pandemia los dueños entraron en una etapa de especulación porque querían renegociar los términos del contrato. Ellos provocaron la situación de desidia y emergencia en la que se encuentra la clínica en la actualidad. Además, en el marco de los nuevos protocolos, empezamos a recibir denuncias de casos positivos e incumplimientos de las medidas de seguridad sanitaria”, detalló Sujarchuk.
Y continuó: “Les marcamos todas las irregularidades pero igualmente no implementaron los protocolos. Entonces avisamos a PAMI y a Salud para intervenir inmediatamente”.
Entre las irregularidades denunciadas se destacan la falta de insumos de protección para el personal de salud, la negativa a realizar hisopados a los trabajadores tras la detección del primer caso positivo y el desecho de residuos patogénicos en bolsas comunes. Sumados a otros tipos de desmanejos administrativos.
“Como no hacían hisopados no se sabía cuántos contagios había y seguían atendiendo. El miércoles recibimos la denuncia de los residuos, el viernes recibimos el traspaso de acciones y se dispuso la inmediata evacuación del edificio”, dijo Sujarchuk.
Durante esta semana, se realizará el hisopado correspondiente a todos los trabajadores, se desinfectará el edificio y se ratificará en el Concejo Deliberante el acuerdo firmado. Mientras tanto, los pacientes fueron trasladados a otros establecimientos.
Desde el Municipio remarcaron que no se trata de una expropiación porque hubo un acuerdo entre las partes para ceder las acciones a “valor libro”, aproximadamente unos 12 mil pesos.
A partir del 2 de mayo, el Municipio se hará cargo de los sueldos de los 250 trabajadores y de todos los costos operativos de la clínica. Los dueños, por su parte, recibirán el alquiler de las instalaciones. Sin embargo, desde el Municipio no descartan que tengan que enfrentar cargos penales por los contagios ocurridos por negligencia.
“Tranquilamente podíamos decir que no era un tema municipal. Pero agarramos la papa caliente para salvar los puestos de trabajo y poder poner a salvo a todos nuestros adultos mayores”, concluyó Sujarchuk.