El incidente comenzó cuando Ciri, durante un viaje con su padre y primo, decidió perseguir a un guanaco que cruzó frente a su vehículo en las proximidades de la Ruta 25.
Tras cazar al animal, Ciri se percató de que había perdido su orientación en el terreno cubierto de arbustos. Ante la inminente oscuridad, el joven improvisó un refugio, encendió una fogata y utilizó el guanaco como alimento.
La búsqueda se inició el jueves por la noche, coordinada por la División Canes Trelew, bajo el mando del comisario Saúl Ale. El equipo de rescate incluyó a Isaías Cárdenas, Daniel Balzi y Ariel Ángel Pérez.
El viernes, el perro rastreador Donatello guió a los rescatistas hasta un brazo de río, donde se encontraron las primeras señales dejadas por Ciri. La operación continuó el sábado, con mejores condiciones climáticas, extendiéndose hacia la zona de Las Plumas.
Participaron en el operativo efectivos policiales de El Dique y Trelew, junto con Bomberos locales. La eficacia de Donatello fue fundamental para resolver el caso, llevando finalmente al rescate de Ciri.
