Admitió que es la cosa más loca que ha encontrado en su vasta trayectoria dentro de la cacería. El video se volvió viral.
Menos de cinco minutos alcanzan para comprobar la estrecha relación (y compatible) entre los animales y la tecnología de última generación. Esto se debe a que en los últimos días un video empezó a viralizarse en Facebook, con imágenes que tiene como protagonista a un oso desarrollándose en su hábitat natural. Lo sorprendente del material audiovisual es que esas imágenes fueron tomadas por el propio protagonista de la historia.
Todo comenzó cuando el cazador Dylan Schilt publicó en su cuenta de Facebook un hallazgo sorprendente, luego de encontrar en el medio de su camino una cámara. Lo que parecía normal empezó a salir del casillero de la lógica, ya que en la red social de Mark Zuckerberg contó que se llevó una grata sorpresa después de cargar el artefacto tecnológico y visualizar su contenido.
“La semana pasada, cuando estaba cazando con arco, me topé con una GoPro que se perdió mientras andaba en moto de nieve. Cuando volví al campamento, lo cargué y no podía creer lo que vi”, comenzó narrando el individuo, practicante de una disciplina repudiada por muchos pero que es muy habitual en Estados Unidos.
El oriundo del Estado de Wyoming, región ubicada al oeste del país y que cuenta con marcadas llanuras y montañas rocosas, amplió: “Después de cuatro meses de estar allí, un gran oso negro la encontró y no solo logró encenderla, sino que también comenzó a grabarse a sí mismo jugando con él”.
El video que se hizo viral
En el video viral compartido por el cazador podemos ver cómo el oso juega con la cámara GoPro. Primero se observa al protagonista, que parece haber encontrado la herramienta tecnológica en la nieve, pasándole la lengua a la cámara y luego intentar introducirla en su boca. Sin éxito alguno, el animal toma la cámara con sus garras y, como un turista, empieza a filmar el imponente paisaje con el cielo y unos pinos gigantes de fondo.
Después, el oso no se da por vencido y vuelve a intentar comerse la cámara, acto en el que no tuvo éxito, otra vez. Ya resignado, el animal coloca la GoPro de frente, como si estuviera intentando sacarse una selfie. Finalmente, el oso juega con el artefacto hasta que se cansa y lo deja en la nieve.