Un acuerdo para modificar la Constitución apaciguó el panorama

A días de cumplirse un mes de comenzado el conflicto chileno que desembocó en la mayor crisis social y política desde la vuelta de la democracia, parlamentarios del oficialismo y la oposición confirmaron que llamarán…

sábado 16/11/2019 - 0:50
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A días de cumplirse un mes de comenzado el conflicto chileno que desembocó en la mayor crisis social y política desde la vuelta de la democracia, parlamentarios del oficialismo y la oposición confirmaron que llamarán a un plebiscito para modificar la Constitución.

La decisión fue anunciada a las 3 de la mañana en el país trasandino, y gracias a dicho anuncio, la marcha convocada para el día viernes, que se venía repitiendo en cada una de las 4 semanas del conflicto, fue significantemente más tranquila que las anteriores, ya que los incidentes fueron menores.

En una extensa sesión se decidió finalmente, tras un acuerdo entre el oficialismo y la oposición, modificar la Carta Magna que rige en Chile desde 1981, sancionada durante el gobierno dictatorial de Augusto Pinochet.

La reforma era uno de los puntos más pedidos en cada una de las protestas registradas en la región, por lo que se establece como un paso enorme de cara a la pacificación del país. Tras 28 días de un país sumergido en conflictos, la cifra de muertos se eleva a 22, mientras los heridos superan los 4mil y los detenidos durante todo el proceso, más de 10mil.

Cientos de personas perdieron la visión debido a los perdigones de las escopetas de agentes Carabineros y del ejército. Así como también varios integrantes de las Fuerzas de Seguridad sufrieron heridas por diferentes elementos contundentes arrojados por los manifestantes en cada enfrentamiento.

«Esta noche es histórica para Chile», «somos responsables, efectivamente, de muchas de las injusticias que los chilenos nos han señalado», fueron algunas de las frases que pronunció Jaime Quintana, presidente del Senado, quien lideró el inicio de la conferencia de prensa conjunta, enfatizando que se trata de una «salida pacífica y democrática de la crisis», y que «es una victoria de toda la ciudadanía» porque se trata de una salida institucional «cuyo objetivo es buscar la paz y la justicia social».

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