El delegado del Ministerio del Interior en Chubut, Ignacio Torres, calificó de “demagógicas” las declaraciones del concejal comodorense por Cambiemos, José Gaspar, cuestionando la política tarifaria en materia de servicios públicos que lleva adelante el gobierno nacional.
El titular de Fundación Pensar en Chubut afirmó que con este tipo de expresiones se sigue confundiendo a la gente con una política de subsidios que salía del mismo bolsillo de los argentinos y que generaba más inflación, cuando en realidad se debe apostar a invertir en una nueva matriz energética para las futuras generaciones.
Consultado por los dichos periodísticos de un integrante de sus mismo espacio como Gaspar, Torres aseveró que “no coincido en lo más mínimo, es más, estoy en las antípodas de su pensamiento en muchas cuestiones, especialmente cuando hace un paralelismo entre los subsidios del gobierno nacional y lo que hoy tienen que pagar los argentinos de su bolsillo”.
“Conceptualmente –agregó- es un error pensar eso y creer que el estado nacional subsidia algo, como si fuera una entelequia que mágicamente genera recursos. Todo subsidio del estado surge de sus arcas, que se nutren del esfuerzo de todos los argentinos. De manera que si esa erogación es por endeudamiento o por emisión monetaria es lo mismo, porque genera un guarismo inflacionario y atenta contra los sectores más vulnerables que pierden poder adquisitivo de sus salarios”, explicó el joven dirigente valletano.
Para Torres, “hay que decir las cosas como son y entender que la contraparte de esto es la necesidad de tener una inversión en infraestructura en un país donde la matriz energética está colapsada y que hoy se está pensando realmente en un país serio”. Reconoció que “discutir las formas, la progresividad, un diferencial para asociaciones civiles, el alcance para una tarifa social, son planteos legítimos y aceptables” pero advirtió que “es peligroso cuando muchos dirigentes, y hablo de todos los partidos políticos, inclusive de nuestro sector, conciben la política como una herramienta para seguir mamando de la teta del estado”.
Sostuvo que algunos “hace 30 años que son concejales, diputados o senadores y es en esos lugares donde generalmente este perfil acomodaticio tiende a hacerse notar, y creen que diciéndole al electorado lo que creen que supuestamente quiere escuchar , pueden sostenerse en el poder y mantener una imagen positiva”.
En cambio, dijo Torres que en su caso “respeto muchísimo más a una persona que piense en gobernar y en gestionar, independientemente del costo político o el oportunismo político, pero que realmente piense en una agenda de desarrollo para las futuras generaciones”. Indicó luego en alusión a los dichos de Gaspar que “estos discursos demagógicos le han hecho muchísimo daño a nuestro país, y creo que fue ese cortoplacismo lo que desmadró económica, energética y hasta culturalmente a nuestro país”.
NORMALIDAD
Luego Torres defendió la estrategia en materia energética del gobierno nacional, y sostuvo que “el presidente Macri plantea un esquema donde las cosas funcionan con previsibilidad, algo tan simple como concebir un país donde se apele a la normalidad”. Y puntualizó que en su caso “prefiero un presidente que me diga la verdad aunque duela, con una agenda de desarrollo real pensada para las futuras generaciones y donde todo el potencial se vea en resultados tangibles, a un presidente que me diga que estamos en Disney cuando en realidad es mentira y que se rasgue las vestiduras hablando de movilidad social ascendente cuando es todo lo contrario”.
Indicó que el gobierno nacional “sí tiene autocrítica, es un gobierno que apela al diálogo y se enriquece en las diferencias, mientras que en otras épocas el Congreso hacía las veces de escribanía del Poder Ejecutivo”.
Destacó Torres que “en los proyectos que eleva el presidente Macri al Congreso, inclusive en un caso tan complejo como es el tema del aborto, el único lineamiento que hay es que cada uno sea fiel a sus ideales. Me parece que es un avance institucional muy grande y de hecho en el mismo espacio de Cambiemos hay posturas diferentes y todos tenemos que apostar a esto en una dinámica de la democracia”.
Pero dijo que en cambio “donde hay falta de autocrítica es en la vereda de enfrente, ya que en los últimos 35 años de democracia el peronismo gobernó el 90 % y generó niveles altísimos de pobreza”. Afirmó que si bien “se llenan la boca hablando de justicia social, pero justamente terminaron logrando una sociedad más injusta, y esto se ve en números concretos”.
Indicó finalmente que “el kirchherismo no fue un gobierno de izquierda, sino que fue un gobierno capitalista populista, donde se exacerbó la satisfacción instantánea de mucha gente. Pero eso no tiene nada que ver con la movilidad social ascendente que profesaba el peronismo, que se preocupaba por que la gente estudie, tenga una vivienda, y acceso a los recursos básicos”.
