En otra jornada del juicio por presunta facilitación de la prostitución y protección policial en el VIP céntrico, declararon un comisario y una psicóloga. Esta afirmó que las cinco mujeres ejercieron esa actividad sexual por primera vez.
El tribunal de debate compuesto por los jueces penales Mónica García, María Laura Martini y Jorge Odorisio; escucharon nuevos testimonios de una nueva jornada de juicio por incumplimiento de deberes de funcionario, facilitación de la prostitución y cohecho que tiene como imputados al excomisario Alejandro Pulley, Guillermina Ferreira Almada y Juan Carlos Cuellar Gamboa.
Los delitos ocurrieron entre el 15 de septiembre de 2014 y el 2 de julio de 2016 en el departamento VIP que funcionaba en la calle Francia al 500, en pleno centro de Comodoro Rivadavia.
La primera declaración fue del comisario Andrés Avila, quien en ese entonces era el segundo jefe de la División de Drogas de Comodoro. Este afirmó que recibió un informe del Centro de Monitoreo sobre el llamado de una mujer que estaba retenida en contra de su voluntad y que la obligaban a prostituirse en un domicilio de Francia al 500.
Tras comunicar la situación al Juzgado Federal se ordenó el allanamiento, donde además de Ferreira Almada y Cuellar Gamboa había cinco mujeres. Colocaron a resguardo a las víctimas y se le dio intervención a Rescate de Víctimas de Trata.
El jefe policial recordó elevar un informe al juzgado donde presumía que las mujeres no estaban contra su voluntad debido a que ellas “salían del mismo y utilizaban celulares”.
La psicóloga del Programa Nacional de Rescate y Acompañamiento de Personas Víctimas de Trata, Daniela Gasparini, mencionó que la madrugada del 1 de mayo de 2015 participó del allanamiento donde supuestamente habría prostitución y 5 mujeres.
Las víctimas, cuatro de nacionalidad paraguaya y la restante argentina, fueron trasladadas a un hotel y fueron entrevistas. También estaban “en situación de prostitución en el lugar allanado a cargo de Guillermina Ferreira Almada, en pareja con Cuellar Gamboa”.
Las víctimas describieron situaciones de vulnerabilidad antes de arribar al prostíbulo y que la mayoría ejercía por primera vez la prostitución. También explicó la forma en que fueron captadas desde sus lugares de origen “por una vecina que conocía a Ferreira Almada y por una prima de ésta”, aseguró la psicóloga.
Fuente: Con Sello Patagónico
