Sube el impuesto a los combustibles y le suma presión a los precios de las naftas

También aumentaron los biocombustibles y la cotización del petróleo. Por quinta vez en el año, en los próximos días podrían subir de nuevo los precios de las naftas y el gasoil. Esto se debe a…

viernes 12/03/2021 - 11:50
Compartí esta noticia

También aumentaron los biocombustibles y la cotización del petróleo.

Por quinta vez en el año, en los próximos días podrían subir de nuevo los precios de las naftas y el gasoil. Esto se debe a que la Secretaría de Energía aplicó un incremento en el impuesto a los combustibles, que las refinerías suelen trasladar a los valores en surtidor. Además, también aumentaron los precios de los biocombustibles a comienzos de mes, que las empresas usan como corte para refinar sus productos y que fue absorbido por ellas.

Por ahora, en YPF niegan que vaya a haber un incremento. La diferencia con los anteriores aumentos es que este sería el primero con Pablo González como presidente, el exvicegobernador de Santa Cruz que reemplazó a Guillermo Nielsen. El mercado de combustibles no está regulado por el Estado en la práctica, pero ningún jugador mueve sus precios si YPF no lo hace primero, ya que tiene incidencia en más del 55% del mercado.

Además, la compañía con control estatal presentará hoy su plan de inversiones para el año, en un acto en el que estarán presentes González, el CEO, Sergio Affronti, y funcionarios nacionales.

Sin embargo, tal vez no haya mejor ejemplo que YPF para mostrar la sábana corta que tiene el sector energético. La empresa depende casi exclusivamente de la venta de las naftas y el gasoil. Los ingresos que consigue en esa área (el downstream) definen las inversiones que puede hacer para aumentar la producción de gas y petróleo (el upstream).

Actualmente tiene un problema de difícil solución: en poco tiempo, sus costos se incrementaron por la suba de la tarifa de los biocombustibles y del impuesto a los combustibles, el alza del precio internacional del petróleo, la inflación y la devaluación del peso, que implica que necesite más pesos para pagar los gastos en dólares.

Si bien se trata de una empresa privada, el 51% de las acciones está en manos del Estado argentino, que presiona para pisar los precios y evitar aumentos en un año electoral.

¿Qué alternativas tiene YPF? Con un riesgo país superior a los 1600 puntos, y tras verse obligada a reestructurar un bono ya refinanciado en poco tiempo, la empresa no puede pedir financiamiento en el mercado externo para incrementar las inversiones. La alternativa de financiarse en el mercado doméstico queda chica para un sector de capital intensivo como el energético.

El año pasado, YPF aprovechó el contexto de pandemia para reducir sus costos en un 20%: reestructuró contratos con proveedores, lanzó un programa de retiros voluntarios y logró un acuerdo con los sindicatos para flexibilizar los regímenes laborales. Pese a esto, la petrolera cerró el año con una pérdida de más de US$1000 millones, un resultado que este año prometió mejorar ante sus inversores.

Cuánto debería aumentar la nafta

Teniendo en cuenta los dos incrementos de costos (impuestos y biocombustibles), la nafta súper debería subir 2,8%; la premium, 2,2%; el gasoil súper, 2,2%, y el premium, 1,9%, según los cálculos de Energy Consilium, la consultora que dirige el exministro Juan José Aranguren, en base a la inflación acumulada del último trimestre del año pasado (11,4%) y de los aumentos autorizados por la Secretaría de Energía.

Estos incrementos no consideran los ajustes correspondientes a la suba del tipo de cambio, la inflación ni el incremento del precio del petróleo. En este último costo hubo un acuerdo no escrito entre las empresas refinadoras –entre las que se encuentran Raízen (Shell) y Trafigura (Puma Energy)– y las productoras (Pluspetrol, Vista Oil, Sinopec) para negociar un precio del barril de US$55 aproximadamente, por debajo de la cotización de US$70 a la que cerró el crudo Brent.

Las productoras cedieron a ese precio por dos razones. En primer lugar, prefieren negociar entre privados sin la intervención del Estado, que, como ocurrió en otras oportunidades, podría amenazar con aplicar un “barril criollo”. En segundo lugar, hay consenso de que es difícil trasladar al surtidor este aumento de precios internacionales tan brusco en poco tiempo.

A cambio, las petroleras pidieron un compromiso de YPF de que habrá un sendero de actualizaciones de precios que le permitirá a la industria llegar a los valores de mercado. Se trata de una promesa no menor en un año electoral. Estos días, la petrolera podría aplicar el primer incremento.

Fuente: lanacion.com

Compartí esta noticia