Su hábitat está en el océano Atlántico pero fue hallado perdido y confundido, aunque afortunadamente recibió ayuda.
Cerca de una zona rural del Reino Unido, un hombre encontró a un espécimen del Fratercula árctica, mejor conocido como frailecillo atlántico.
La pequeña ave se encontraba perdida y confundida, aunque para su suerte había sido hallada por un sujeto que sabía de qué especie se trataba, y que estaba lejos de su hogar.
Por este motivo el hombre introdujo al frailecillo dentro de una caja y se comunicó con la Royal Society for the Prevention of Cruelty to Animals (RSPCA, organismo que vela por la protección de los animales).
El llamado fue recibido por Shane Lynn, una oficial de rescate de animales de la RSPCA, que rápidamente pudo dilucidar que el ave se había perdido y terminó aterrizando kilómetros tierra adentro, muy lejos de su hogar.
Al pequeño frailecillo lo llevaron a un chequeo en el veterinario para asegurarse de que estaba bien, y también fue alimentado una vez se determinó que estaba en perfectas condiciones.
La misma institución se encargó de dar a conocer la historia del frailecillo en las redes, publicando en su Facebook: “Este pobre frailecillo estaba deambulando por un carril de campo, a millas de la costa. Un hombre amablemente atrapó al pequeño, lo colocó en una caja y lo llevó a casa. Afortunadamente, después de una pequeña comida y un chequeo rápido, lo liberamos”, dijeron a comienzos de mayo de este año.
Una vez que se supo que sus condiciones físicas eran óptimas, el ave fue transportada al mar, donde fue liberada gracias a la solidaridad de quien afortunadamente la encontró.
En el momento en que el frailecillo saltó a la arena y comenzó a volar a través del mar, Shane no pudo evitar soltar un par de lágrimas por el alivio y satisfacción de cumplir con su tarea de salvar y devolver animales a su hábitat.