Un grupo de presos condenados de Comodoro Rivadavia donó panificados de elaboración propia al Hogar de Ancianos Paulo VI.
Según publica Consello Patagónico en los días previos a la Navidad habían entregado panes dulces a los comedores de Mirella Angulo del barrio Las Flores y Mi Lugar del Abel Amaya.
La tarea de capacitación y solidaridad de los internos se cumplió con la colaboración de las integrantes de la Oficina de Asistencia a las Personas Privadas de la Libertad, dependiente de la Defensa Pública, Romina Marcos y Juliana Fuentes; y el jefe de la alcaidía, comisario Diego Ruhmling.
El condenado Diego Aguirre, quien cumple una pena de 16 años por su participación en el homicidio del empresario de la carne, Orlando Jurado, ocurrido el 10 de febrero 2017; contó que el proyecto de la panadería estaba pendiente desde hace unos dos años y que se pudo concretar hace pocos meses, donde participaron siete condenados.
“Se nos dio la oportunidad de hacerlo y nos metimos de lleno, más que nada por la situación que hay afuera (en la ciudad), hay mucha necesidad. El día de mañana cuando salgamos de acá queremos estar capacitados en algo, que no volvamos a delinquir y que volvamos a cambiar el pensamiento”, afirmó el preso.
