TN.- Bariloche es uno de los destinos preferidos de los viajeros argentinos. La ciudad y los paisajes naturales que la rodean tienen una oferta turística amplísima que varía a lo largo del año, y el otoño es un gran momento para visitarla. Sobre todo ahora que se sabe que el PreViaje 4 podrá usarse entre el 24 de mayo y el 30 de junio, coincidiendo con esta estación. Con bosques teñidos de naranja y días perfectos para disfrutar de la gastronomía, Bariloche muestra en el otoño una de sus mejores versiones.
A continuación, siete planes imperdibles en el destino:
1. Hacer una excursión en catamarán
Navegar por el lago Nahuel Huapi es un planazo. Podés elegir entre la excursión a la Isla Victoria y el Bosque de Arrayanes, la navegación hacia Puerto Blest y la Cascada de los Cántaros o la exploración del Brazo Tristeza y la cascada del arroyo Frey.
2. Explorar el Circuito Chico
Se trata de un recorrido de medio día que podés hacer por tu cuenta o con excursión. Los puntos clave son las vistas desde el cerro Campanario, Colonia Suiza y los paisajes de Bahía López, Punto Panorámico y el Parque Llao Llao.
3. Disfrutar de la gastronomía
Después de un día en la naturaleza, nada mejor que recargar energías. En las casas de té hay scones, panes, mermeladas caseras y tortas; y para almorzar y cenar están las cocinas de fuegos, que hacen carnes y vegetales a las brasas, y las fábricas de cerveza artesanal.
4. Tomar mate al lado del lago
Para sentarse en la arena a tomar mate, una buena opción es Bahía Serena, una playa tranquila y familiar bañada por las aguas azules del lago Nahuel Huapi. Se ubica en el kilómetro 12 de la avenida Bustillo.
5. Andar en el Tren Patagónico
Una opción interesante y no tan conocida es la del Tren Patagónico, que permite contemplar al atardecer la transición entre dos paisajes bien distintos: el de la Cordillera de los Andes y el de la estepa.
6. Visitar los museos
Si te tocan días de lluvia, dedicalos a conocer los espacios culturales que ofrece la ciudad, como el Museo de la Patagonia, el Museo Paleontológico y el Museo del Chocolate.
7. Descubrir el Valle Encantado
Otro plan original es conocer el Valle Encantado, inserto en el paisaje de la estepa. Se presenta como un oasis de formaciones rocosas, y las propuestas para conocerlo incluyen caminatas a cuevas naturales y almuerzo en una estancia patagónica.