Así lo definió el titular del SOEM, Omar Unquén, luego de conocer las pintadas en la sede sindical en donde lo señalaban como «mentiroso» y «traidor» hacia los afiliados. «Esto que están haciendo no va a sumar en nada», sostuvo.
«Algunos compañeros todavía no asumieron la derrota, es parte de lo que tiene que ver con una interna gremial que se terminó hace 75 días cuando ganamos con la nueva dirigencia. Es problema de ellos que se manifiesten de esa manera, es lamentable porque no va a sumar nada«, explicó esta mañana el secretario general del Sindicato de Obreros y Empleados Municipales.
Al ver los crudos mensajes pintados en las persianas de la sede sindical sobre calle San Martín, Unquén dijo que «están mirando las cámaras y en cualquier momento vamos a tener novedades». Además, dio su opinión del tema y planteó que seguramente le pagaron a alguien para que haga este trabajo sucio. «A cualquier ‘pibito’ le tiran algo y capaz que va y pinta. Si quieren seguir pintando, que pinten, a nosotros no nos preocupa. Sabemos lo que tenemos que hacer con responsabilidad y con trabajo», enfatizó.
Con cifras casi exactas, el titular del sindicato aseguró que, tras asumir, lograron una mayor cantidad de afiliación por parte de los empleados. «Teníamos alrededor de 1160 afiliados cuando asumimos, hoy tenemos 1720, casi 600 afiliados más y los compañeros están confiando en nosotros«.
Respondiéndole a los que pintaron la sede, Unqúen descargó: «estamos organizando los festejos del día de las infancias por primera vez en 58 años que tiene el gremio, por eso no tenemos tiempo de responder y tampoco nos interesa, es tirar más leña al fuego».
Por último, aclaró: «no tenemos preocupación por una escalada mayor luego de las pinturas«.
