Para celebrar el día del niño, desde el club Jorge Newbery planeaban regalar desayunos y juguetes a los más chicos en lo que iba a ser una fecha de festejos luego de juntar juguetes por más de un mes y medio, pero no pudo ser así debido al cruel robo. “Encontrar todo revuelto y que te afanen no puede ser, te parte en dos”, lamentaron desde la organización del evento.
Más de 300 juguetes fueron sustraídos del club Jorge Newbery, donde varias personas planeaban regalarlos junto con un desayuno a niños que más lo necesitaban, pero el evento solidario –inicialmente- no pudo ser.
“Entramos el sábado a la mañana y nos encontramos con que estaban las rejas abiertas, habían barreteado la puerta”, describe Luisa Cedrón a El Comodorense Radio por FM La Petrolera.
«Lo veníamos juntando hace más de un mes y medio. Encontrar todo revuelto y que te afanen no puede ser, te parte en dos»
En el lugar “revolvieron todo y se llevaron los regalos que estaban preparados. Se tomaron todo el tiempo hasta de abrir algunas bolsas”, detalla, y lamenta que los malhechores “se llevaron más de 300 juguetes que veníamos juntando hace más de un mes y medio”.
Es que “el sábado queríamos entregar un desayuno y un juguete”, comenta Luisa, “pero esto nos cambió todo y ahora el desayuno lo vamos a entregar pero sin juguete porque tenemos pocos”, añade.
Para la entrega de desayunos, que inicialmente iban a ser 3 mil pero según Cedrón “esto nos pinchó todo”, se necesita la colaboración de la gente nuevamente: en el SUM del club a partir de las 17hs de cada día reciben alfajores, tutucas, turrones y otras golosinas para poder entregar más desayunos.
LAS OLLAS SOLIDARIAS SIGUEN
Las 18 personas que dedican su tiempo para realizar ollas solidarias y repartir viandas que alimentan a 3 mil personas, seguirán realizando su servicio a la comunidad a pesar del golpe recibido.
“Nosotros seguimos con la olla, ya vamos por la decimosegunda”, celebra Luisa, que elige no bajar los brazos.
En la misma línea, anunció que este sábado a las 12 del mediodía estarán entregando las viandas como se hace habitualmente, y que luego comenzaran con la repartición de desayunos.
