Un comensal paró en una parrilla al costado de la ruta en Córdoba para saciar su hambre y se llevó una sorpresa increíble con el precio.
En la provincia de Córdoba, un hombre paró en una parrilla para comer algo y seguir viaje luego. No pensó que el lugar donde eligió comer tendría precios tan elevados.
Ni siquiera al momento de elegir el plato y postre se dio cuenta, aparentemente, del precio que tenían los productos en aquella parrilla.
Fue así que se pidió un plato de fideos con carne, un vino de ¾ de litro de origen nacional y un flan mixto.
Haciendo la suma, el plato principal le costó $1.490 pesos, el vino $820, la soda $380 y el postre unos $510 pesos. Todo se redondeó en $3.200 pesos.
Luego de pagar y una vez en su vehículo, el protagonista de la historia viral fotografió la factura y la subió a las redes en modo de protesta por el exorbitante precio de una comida para una sola persona en esa parrilla cordobesa.
Enseguida llovieron los comentarios, divididos entre quienes criticaban al comercio por sus elevadísimos precios, y quienes le echaban en cara que no se fijó bien los precios antes de pedir, o los pidió sabiendo y luego se terminó quejando igual.
