El 9 de diciembre de cada año los hinchas del Millonario conmemoran la histórica final en la que el equipo de Gallardo se alzó con la Libertadores tras ganar 3 a 1 en el Bernabeu.
Este miércoles se cumplen 2 años de la final disputada en el estadio del Real Madrid, donde River se impuso por 3 a 1 a Boca en lo que fue el superclásico más importante de la historia.
En ese entonces, la final de la Copa Libertadores se disputaba en formato de ida y vuelta. Fue la última copa en definirse de esta manera, y nada más y nada menos que con un superclásico.
En la ida ambos equipos empataron 2 a 2 en La Bombonera, partido que en principio se vio suspendido por las abundantes lluvias que cayeron el día del partido, aunque se jugó el día posterior donde Boca empezó poniendose en ventaja con un gol de Wanchope Ábila, aunque Lucas Pratto empató tras sacar de mitad de cancha.
Antes de irse al descanso, Benedetto metió el 2 a 1 para Boca, y ya durante el complemento el Cali Izquierdoz metió en su arco el segundo gol para River, que significó el 2 a 2 definitivo. Antes de finalizado el partido, Armani le contuvo un mano a mano increíble a Benedetto.
Cuando se iba a disputar el partido de vuelta, hinchas de River agredieron al micro que transportaba a los jugadores de Boca, destrozando varias de sus ventanas e hiriendo en su ojo a Pablo Pérez, lo que motivó la suspensión del partido en el Monumental.
La misma suerte corrió el día siguiente, cuando volvió a suspenderse debido a que «los jugadores de Boca no se encontraban en condiciones de jugar la final esos días» por las heridas que les ocasionó los objetos que habían sido arrojados contra ellos.
Tras varios idas y vueltas, en un hecho insólito, la final se trasladó a Madrid, donde River haría de local. El partido comenzó con ventaja para Boca, tras un golazo de Benedetto que venció se tomó revancha venciendo a Armani en un mano a mano.
Ya en el segundo tiempo Lucas Pratto volvería a convertir para empatar la serie nuevamente, llevando el partido a tiempo extra. En este último trayecto, fue expulsado Wilmar Barrios en el equipo que en ese entonces dirigía Guillermo Barros Schelloto, lo que terminaría de inclinar la balanza para el equipo Millonario.
A minutos de finalizar el partido, Juan Fernando Quintero metió un zurdazo histórico que le daba la victoria a River en la final.
Boca buscó pero el que encontró fue el Millonario, que en una corrida para el recuerdo del Pity Martinez consiguió el tercero y terminó con las ilusiones del Xeneize, coronándose campeón de América por cuarta vez en su historia y ganando la final más importante que alguna vez tuvo la Copa Libertadores.
