Eduardo Alves de Sousa golpeó al otro hombre que debió ser hospitalizado. La escena quedó registrada por las cámaras de seguridad.
Una mujer fue a ayudar a un vagabundo y como no regresaba, su marido decidió ir a buscarla. Cuando se dirigió a la parroquia donde supuestamente su esposa estaba colaborando, la encontró teniendo relaciones sexuales arriba de un auto con el indigente.
Las imágenes muestran a Eduardo Alves, de 31 años, golpeando el capot del vehículo y luego las ventanas, hasta que finalmente da la vuelta al auto, abre la puerta y aparece su mujer Sandra Mara Fernandes, según publica TN.
En ese momento, las luces del interior del auto se encienden. Es ahí cuando que un hombre baja del vehículo e intenta escapar, pero el entrenador personal lo persigue y lo golpea ferozmente, creyendo que se trataba de una violación hacia su esposa.
Segundos después, la mujer baja del vehículo y se arrodilla suplicándole a su marido que deje de golpearlo, pero Alves hace oídos sordos y sigue atacando al otro hombre. Mientras tanto, se acercan varios vecinos e intentan calmar la situación.
Finalmente aparecen agentes, quienes deciden enviar a la pareja a la comisaría.
La Policía Civil del Distrito Federal (PCDF) continúa investigando el caso y en una primera instancia desestimaron la hipótesis de violación.
Por su parte, la persona agredida fue llevada al hospital con moretones en la cara y los ojos morados.
En declaraciones a la policía, el hombre habló de violación y de un brote psicótico de su esposa; mientras que ella aseguró que estaba interesada en ayudar a los más vulnerables a través de la iglesia.
Además, le comentó a una amiga que había recibido un “mensaje de Dios” para ayudar al hombre con el que la sorprendieron teniendo sexo.
La comerciante justificó de manera insólita su accionar: afirmó que vio “imágenes de su esposo y Dios” en el vagabundo.