El suizo superó en la final al escocés Andy Murray por 4-6, 7-5, 6-3 y 6-4 y se quedó con el tercer Grand Slam del año de tenis de la ATP. Es el séptimo título en la hierba de Londres para el helvético que desde mañana aparecerá primero en el escalafón mundial.
Es el Rey de los «Unos». Federer hizo historia venciendo a Murray. Y como Atila, donde Roger pisa, no crece más el pasto. Y volverá a ser el N° 1 del mundo, alcanzando el récord de Sampras: 286 semanas en la cima.
Los Hunos fueron un pueblo nómade de Asia que arrasó con todo a su paso y hasta puso de rodillas al Imperio Romano de Occidente allá por el año 476. Entre los siglos IV y V invadieron su continente y gran parte de Europa con un rey a la cabeza: Atila. Su poder era tal, que se decía que donde Atila pisaba, el césped no volvía a crecer. Algo similar pasó un 8 de julio del 2012 con otro monarca: Roger Federer. El suizo hizo historia, o para que quede más lindo, his7oria. Venció a Andy Murray y logro su séptimo Wimbledon, igualando a Sampras como el más ganador. Pero hay más. RF volvió a ser el número uno del mundo y, como Pete, llegará a las 286 semanas en la cima.
Linda final para ver en Londres. De un lado, Federer, un jugador querido en cada rincón del mundo y que ostenta innumerables récords. Del otro, Andy Murray, la esperanza británica para volver a festejar luego de 76 años. Y los locales empezaron a delirar, porque el escocés se llevó el primer set luego de una hora de juego por 6-4. Pero, claro, el suizo demostró por qué entra en la discusión sobre quién es el mejor de la historia. Con dos voleas exquisitas, de esas que no te aburrís de repetir, empató el match. Ahí apareció la lluvia, el All England Club se cerró y Roger demostró que no tiene techo.
Con gran condición atlética, unas piernas que lo llevaron de acá para allá, una muñeca brillante, un revés letal y una clase magistral (ya no alcanzan los adjetivos para describirlo), RF maniató y le encontró la vuelta a Murray. Ojo, Andy jugó un buen tenis, pero enfrente se encontró con una raqueta enorme. Federer cerró el tercer set con un ace (6-3), salvó break points en contra en el cuarto, logró sacar ventaja con un revés cruzado y terminó la discusión por 6-4 en tres horas y 24 minutos. Ambos terminaron llorando: uno por lo que se perdió y el otro por volver a ser el rey del mundo.
¿Los números de Federer? No se asusten. Con este Wimbledon llegó a siete coronas en Londres, igualando a Sampras y a William Renshaw (en era amateur). Acumula el récord absoluto de 17 títulos de Grand Slam, tres más que Pete. Son 24 las finales en este tipo de torneos y dejó atrás a Ivan Lendl, con 19. Además, suma 243 victorias. Y alcanzó otra marca bestial: desde el lunes volverá a ser el número uno del mundo, puesto que no ocupaba desde mayo del 2010, y llegará a las 286 semanas, igualando a Sampras, al que pronto dejará atrás. Con 30 años, demostró que le sobra cuerda y puso las cosas en su lugar.
Fuente: Diario Olé
