Presidió la preliminar Mónica García, jueza penal; el Ministerio Público Fiscal fue representado por Ariel Corredera, funcionario de fiscalía; en tanto que la defensa de Ortellado fue ejercida por Gustavo Oyarzun, defensor público.
El imputado accedió voluntariamente a declarar sosteniendo que él no fue el autor del robo, sino que fue otra persona. Que “no tiene la culpa de vivir en ese barrio y que el testigo está mintiendo”. Seguidamente el defensor “objetó la acusación e instó el sobreseimiento ya que debe elevarse la causa a juicio cuando exista probabilidad que el acusado es con probabilidad el autor de un hecho punible. En este caso no existe firmeza en la evidencia para tener a Ortellado como autor”.
A continuación, el funcionario de fiscalía solicitó se rechace el planteo de sobreseimiento y aseguró que existe probabilidad de autoría del imputado en al caso. Mencionando tres testigos, más el taxista que lo llevó hasta la farmacia y luego hasta su domicilio a Ortellado. También se concretaron ruedas de reconocimiento de personas donde ambos testigos reconocen a Ortellado como el autor del hecho. Concluyendo el funcionario que el cuadro probatorio es lo suficientemente sólido para elevar la causa a juicio.
Por último, se concretó el ofrecimiento de prueba documental y testimonial del caso, se realizaron convenciones probatorias y el funcionario solicitó se mantenga la prisión preventiva que cumple Ortellado hasta la realización del juicio. Manteniendo la jueza la prisión preventiva de Ortellado por el término de tres meses y dispuso que se fije de debate dentro de esos tres meses.