Hay ocasiones en que la línea que divide la tragedia de la comedia es muy fina, y eso fue lo que ocurrió el pasado 2 de noviembre, cuando el automóvil de un abogado, funcionario de la Fiscalía, fue robado por segunda vez en solo 11 días, esta vez desde el mismísimo frontis de la unidad policial que lo había recuperado. Debido al desaguisado, el alto mando de Carabineros ya instruyó un sumario interno tendiente a clarificar eventuales responsabilidades administrativas.
Según consigna Radio Bío Bío, todo comenzó el pasado 22 de octubre cuando un abogado, funcionario de Fiscalía, denunció el robo de una SUV Ford Edge, año 2017 en la comuna santiaguina de Quinta Normal.
Once días después, carabineros de la 56ª Comisaría de Peñaflor, otra comuna santiaguina, acudía a la llamada de un vecino que informaba, a eso de las 7 de la mañana, que un vehículo abandonado se encontraba entorpeciendo la salida de autos de su vivienda.
Primero revisaron la patente, que tenía fecha de 2019 y pertenecía a una persona con domicilio en la ciudad sureña de Concepción. Pero al contrastarla con el número del chasis -el que habitualmente está inscrito en la parte baja del parabrisas-, notaron que dicho número hacía referencia a otro automóvil del año 2017.
Tras chequear todos los antecedentes, la policía determinó que la SUV robada pertenecía a F.J.A.T., funcionario del Ministerio Público, abogado asistente de la Fiscalía Metropolitana Occidente y quien periódicamente ejerce como fiscal en distintas audiencias.
Los funcionarios policiales procedieron entonces a llevar el automóvil hasta la comisaría y lo estacionaron en el frontis del cuartel policial. Tras los peritajes de rigor hecho por especialistas de la SIP, el vehículo quedó en condiciones de ser entregado a su dueño.
Sin embargo, la historia daría un giro impensado ese mismo día a las 13:30 horas, cuando el suboficial que se encontraba de guardia dio un vistazo fuera del recinto y se percató de que el vehículo recién recuperado había vuelto a desaparecer.
Al darse cuenta del hecho, el carabinero revisó las cámaras de seguridad de la comisaría solo para confirmar que una hora antes, y a plena luz del día, un delincuente aún no identificado se había subido tranquilamente a la Ford Edge y la había robado frente a sus propias narices. En suma, el automóvil fue sustraído dos veces en sólo 11 días y, para peor, esta vez mientras se encontraba bajo la custodia de los efectivos policiales.
Sumario interno
Tras el segundo robo del vehículo, Carabineros reportó formalmente lo sucedido a la Fiscalía Local de Talagante. En tanto, contactada sobre lo sucedido, la víctima no quiso responder las consultas de la prensa.
Desde el Alto Mando de Carabineros de Chile confirmaron lo ocurrido e indicaron que se inició una investigación interna para establecer eventuales responsabilidades administrativas. Además, señalaron que todos los antecedentes relativos a este caso fueron puestos a disposición del Ministerio Público.
Por su parte, el abogado penalista Nelson Salas Stevens, señaló que el segundo robo “implica que la compañía de seguro, que es quien paga el monto del valor de la especie sustraída, puede ejercer acciones civiles en contra de Carabineros por un actuar negligente”.
A pesar de lo insólito de la situación, no es primera vez que un hecho de estas características ocurre, pues un caso similar se produjo en agosto del año pasado, precisamente en la comuna aledaña de Talagante.