¿Puede la Argentina entrar en cesación pago de sus obligaciones? En efecto, los economistas coinciden en que la necesidades financieras en cuanto al pago de la deuda están cubiertas para 2019, año en que Mauricio Macri se jugará la continuidad en el Gobierno. Las dudas están puestas desde 2020 en adelante, cuando no se sabe quién asumirá las riendas del país.
El Riesgo País se ubicaba este viernes en torno a los 770 puntos básicos, alcanzando máximos en 3 meses. En sintonía con este deterioro de la confianza, el dólar subió para cerrar en el segmento minorista a $39,27, de acuerdo al promedio del Banco Central. Fue un salto de 47 centavos en relación al cierre previo que puso al dólar a orillar nuevamente $40.
El Riesgo País, elaborado por la banca JP Morgan, mide las posibilidades de un país de caer en default de su deuda soberana. La suba de 2,7% de este viernes implica un golpe para los bonos argentinos.
¿Puede la Argentina entrar en cesación pago de sus obligaciones? El acuerdo que el Gobierno firmó con el Fondo Monetario Internacional (FMI) este año apunta a disipar ese fantasma. En efecto, los economistas coinciden en que la necesidades financieras en cuanto al pago de la deuda están cubiertas para 2019, año en que Mauricio Macri se jugará la continuidad en el Gobierno.
Las dudas están puestas desde 2020 en adelante, cuando no se sabe quién asumirá las riendas del país –según publica Urgente 24-.
«Los dólares del FMI alcanzan hasta la primera parte de 2020. En este sentido hay que recordar que, si todo sale bien, de los US$57.100 MM del préstamo Stand By del FMI, la administración de Cambiemos se consumiría US$51.200 MM, quedando tan sólo US$5.900 MM para el próximo gobierno en 2020. No abundan, ni mucho menos sobran los dólares del FMI», sostiene el último informe de la consultora Economía & Regiones.
Pero el aporte del FMI no logra dar con la certidumbre pretendida por el Gobierno. Como recuerda el economista Julián Zícari en un artículo de El Cronista Comercial, cuando Mauricio Macri anunció que iniciaría conversaciones con el Fondo en mayo, el Riesgo País se ubicaba en los 488 puntos. Hoy, tras cerrar el acuerdo que incluyó un refuerzo posterior, el índice está cerca de los 800 puntos.
«Es decir, el soporte externo y el blindaje financiero anunciados no disiparon las dudas, sino que el riesgo continuó aumentando, siendo el país cada vez menos creíble para el mercado», agrega Zícari.
En ese marco, desde sectores opositores insisten en la necesidad de renogociar el acuerdo con el FMI. Hablan de una reestructuración que podría implicar, por ejemplo, una quita sobre el capital de los US$57 mil millones pautados.
Desde Axel Kicillof hasta Sergio Massa coinciden en abrir el acuerdo para retocarlo. Cuentan con el envíon intelectual del premio Nobel en Economía Joseph Stiglitz, quien había recomendado en septiembre «reperfilar» la deuda.
Pero, incluso, desde la filas del oficialismo también advierten sobre la necesidad de acordar nuevos términos con el FMI. Fue Carlos Melconian quien lo expuso. «El 10 de diciembre creo que todos van a querer reconsiderar el acuerdo; Macri también», dijo recientemente.
Melconian no se refería a ir a pedir una quita, sino para «agarrar la manija de la política económica» y que esta no sea digitada desde la oficinas del Fondo en Washington.
«Es algo muy preocupante, no podemos recuperar la confianza y estamos en los niveles más altos de la época Macri. Hay cada vez más gente propia y extraña que habla de una renegociación con el FMI y eso claramente no ayuda», indicó el analista financiero Christian Buteler, de acuerdo al portal lapolíticaonline.
El informe de Economía & Regiones también sugiere una renegociación del acuerdo en cuanto a los actuales vencimientos y haga un nuevo préstamo como opción a un fuerte fiscal que el Ejecutivo debería aplicar en los próximos años. Sin embargo, ven poca probabilidad de ello.
Según el documento, «está claro que Argentina no tiene otra alternativa que hacer un ajuste fiscal de 5,5% del PBI durante los próximos dos años». Y agrega: «La otra alternativa sería que el FMI nos vuelva a prestar y nos postergue los pagos del actual stand by. Sin embargo, creemos que es muy poco probable».