Pablo García Borboroglu tiene una larga trayectoria en la conservación de pingüinos y áreas marinas.
En la Legislatura del Chubut quieren darle un reconocimiento de honor al doctor Pablo García Borboroglu, ganador del premio “Whitley Gold Award” -el «Oscar» de la ecología- que le fuera otorgado por la Whitley Fund For Nature (WFN) en reconocimiento a su trayectoria, su trabajo mundial en ciencia y conservación de pingüinos y áreas marinas.
La diputada por Cambiemos, Jacqueline Caminoa, presentó un proyecto de resolución para distinguir a García Borboroglu “por su permanente e incansable labor en la conservación de pingüinos y sus hábitats y la protección de las áreas marinas de nuestra provincia y el Hemisferio Sur”. En este sentido se propone realizar una sesión especial en la que se le entregará una plaqueta, diploma y copia de la resolución.
García Borboroglu, biólogo e investigador de CONICET, alcanzó una de las distinciones más importantes a nivel global en lo relativo a conservación: el Premio “Whitley Gold Award”, también conocido como “el Oscar Verde de la ciencia”. Egresado de la sede Trelew de la Universidad Nacional de la Patagonia San Juan Bosco (UNPSJB) y doctorado en la Universidad del Comahue de la ciudad de Bariloche, su trabajo de conservación lo realiza en el Centro para el Estudio de Sistemas Marinos (CESIMAR/CCT) del Centro Nacional Patagónico (CENPAT CONICET) y es el fundador y presidente de la Global Penguin Society.
Sus conocimientos ayudaron a proteger más de tres millones de hectáreas marinas distribuidas en cuatro continentes. García no solo se limitó a la producción científica. Su compromiso con la divulgación y la concientización sobre el cuidado del ambiente marino lo han llevado a disertar en Naciones Unidas para lograr que la conservación forme parte de la agenda política mundial.
Además, el científico contribuyó a la creación de la Reserva de Biósfera de UNESCO más grande del país, y facilitó la visita de 6.000 mil niños de países en desarrollo a las pingüineras cercanas con el objetivo de incentivar la cultura de la conservación en la sociedad.
Su trabajo ha tenido un gran impacto en la conservación de los pingüinos y su hábitat en cuatro continentes. En 2009 el científico fundó la Global Penguin Society (GPS), la primera coalición mundial para la protección de pingüinos. Utilizando un enfoque multifacético que combina ciencia, gestión y educación, la GPS conserva pingüinos en todo el hemisferio sur y los utiliza como un buque insignia para una mayor conservación del medio ambiente marino.
El chubutense encabeza acciones a gran escala para enfrentar estas amenazas y equilibrar la tutela local con el fortalecimiento de la protección nacional e internacional. En los últimos 29 años, su trabajo reunió a más de 125 organizaciones y benefició a 1,2 millones de pingüinos. Sus resultados son un gran ejemplo de cómo la ciencia puede aumentar la visibilidad de los problemas de conservación, informar a los tomadores de decisiones, influenciar la gestión y catalizar la acción local, nacional e internacional.