Así lo expresó esta tarde el concejal Omar Lattanzio, del bloque Raúl Alfonsín en comunicación con El Comodorense Radio. Además, el edil habló sobre el proyecto de las 1150 viviendas y la problemática de los perros en la ciudad.
«Por el momento no soy candidato a nada, me han hablado, pero hay mucho para hacer todavía asique sigo trabajando por la gente y Dios dirá si sigo o me vuelvo a trabajar en mi taller. No me desespera la política», comentó primeramente.
Anuncio de las 1150 viviendas
Asimismo, se refirió al anuncio de las 1150 viviendas que se construirían entre Km. 3 y Km. 4 y aseguró que «me enteré por la radio, consulté y nadie sabe absolutamente nada. La verdad que mientras uno va viendo cómo está el tema de tierras, el IPV y todo lo que pasó, casas que jamás se le dieron a la gente y nadie va preso, son todas pavadas y todavía no pueden acomodar el despelote que tenemos en la ciudad. Sinceramente no sé quién lo tiró».
Continuando y sobre el urbanismo de Comodoro Rivadavia, puntualizó: «esto ya viene desordenado de antes que lleguemos nosotros, se hablaba mucho de gente que hicieron cualquier cosa con el tema de tierras. Realmente muy mal manejado, muy oscuro todo y hoy hay cosas que no se entienden. No hay respuestas de nada y no sé cómo esta coordinado el tema de llevar adelante la ciudad».
«Tenemos cualquier cantidad de lugares que no tienen luz, agua y gas y la gente vive en condiciones de terror. Hay cosas para hacer antes de pensar si sigo o no».
Finalizando, el concejal fue consultado sobre una posible reunión para tratar la problemática que hay de los animales en la ciudad, los perros callejeros y la modificación de la ordenanza y aseguró que «la modificación de la ordenanza todavía no se trató, yo no tuve ninguna reunión y desconozco si lo hizo el Frente de Todos. Hoy me consultaron sobre el tema de la ordenanza y realmente hacer ordenanzas por el simple hecho de decir hicimos, no sirve».
Por último, dijo: «cada vez que hablamos de los perros es cuando muerden a alguien y la solución no es solamente castrarlos. Cuando uno hace ordenanzas hay que cumplirlas. El pueblo me paga para que yo los represente y si hago ordenanzas son cosas para que le sirvan a la gente. Yo también puedo poner nombres a las calles, a las plazas o los bulevares, pero creo que tenemos que trabajar todos juntos para que las cosas sean en beneficio de los vecinos y si no hacen cosas en favor de ellos deben irse, no sirven».