Produce pérdida de masa muscular en adultos mayores y la actividad física es uno los factores primordiales del tratamiento.
Una a patología secundaria que aparece luego de que se transitó la COVID-19, en especial en aquellas personas que estuvieron hospitalizadas o en unidades de terapia intensiva, se conoció hace un tiempo. Se trata de la sarcopenia, una afección que consiste en la pérdida de fuerza y masa muscular.
Un estudio realizado en el Reino Unido publicado en la revista Aging and Disease, advierte la presencia de la «sarcopenia aguda por COVID-19» como una patología secundaria asociada al coronavirus. La enfermedad afecta mayoritariamente a los adultos mayores y en aquellos que estuvieron internados en unidades de cuidados intensivos.
Bruno Spinassi, especialista en ortopedia y traumatología del hospital Pirovano, explicó a El Tribuno que «la gente que tiene COVID y que está postrada por 15 días o más, sufre una pérdida de masa muscular y fuerza, más aún las personas añosas, porque durante ese tiempo no hubo una actividad muscular normal».
La sarcopenia se caracteriza por una pérdida de la masa muscular, la fuerza y el funcionamiento de los músculos y se identifica, mayoritariamente, en los adultos mayores. La pandemia provocó que esta patología se extienda a otras edades tras una internación prolongada de su actividad física.
«Tenemos un tono muscular de base que usamos desde que nos levantamos hasta que nos acostamos, pero dejamos de usarlo si estamos todo el tiempo en misma posición. Durante la infección, existe una atención más centrada en otros aspectos, como la evolución respiratoria, y la sarcopenia queda en un segundo plano», explicó el especialista.
Una vez salidos del covid, «recuperar la masa muscular no es fácil, más en paciente mayores de 60 años», dijo el especialista, al tiempo que aclaró que «el grado de sarcopenia tiene una relación directa con el tiempo de postración» como consecuencia del virus.