«Las personas pueden adquirir la gripe aviar principalmente a través del contacto directo con animales infectados (vivos o muertos) o con sus entornos contaminados», manifestó Fabian Puratich en conexión con FM La Petrolera.
El caso fue confirmado por SENASA en un ave migratoria silvestre de la laguna de Pozuelos, cerca de la frontera con Bolivia. El riesgo de transmisión a humanos actualmente se considera bajo y, hasta el momento, la enfermedad no se transmite a las personas por el consumo de carne aviar y sus subproductos, en este sentido, el subsecretario de Salud de la Nación remarcó que «no hay peligro de contagio a través de la ingesta de alimentos».
La influenza aviar (IA) es una enfermedad viral que afecta tanto a las aves de corral como a las silvestres, y ocasionalmente también puede afectar a las personas expuestas, siendo causada por múltiples subtipos (H5N1, H5N3, H5N8, etc.) cuyas características genéticas evolucionan rápidamente.
La transmisión del virus a las personas ocurre cuando las secreciones o excrementos de aves infectadas son inhaladas.
El virus puede entrar por la boca, nariz u ojos. A su vez, las aves acuáticas silvestres son un reservorio importante de los virus de influenza A y las poblaciones de aves de corral pueden infectarse por contacto con aves silvestres.
Desde el Ministerio de Salud de la Nación se recomienda seguir las siguientes medidas de cuidado:
• Lavado frecuente de manos con agua y jabón o usar desinfectantes a base de alcohol.
• Evitar el contacto directo con aves silvestres y, de ser posible, solo observarlas desde lejos.
• Evitar tener contacto sin protección con aves de corral que parecen estar enfermas o muertas.
• En relación a aves en grandes ciudades (gorriones, palomas) el riesgo se considera muy bajo ya que estas aves no se han mostrado hasta el momento muy susceptibles al virus.
• En caso de encontrarse con algún ave enferma o muerta, evitar el contacto y dar aviso a las autoridades sanitarias del Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (SENASA).
• No tocar superficies que podrían estar contaminadas con saliva, mucosa o heces de aves silvestres o de corral.
• Actualmente, no hay restricciones para viajar a zonas afectadas por influenza aviar. Sin embargo, se recomienda que las personas que viajan a zonas con brotes tomen las medidas de prevención necesarias para evitar el riesgo de contraer la enfermedad.