Los análisis de sangre y demás estudios de laboratorio serán más caros a partir de este miércoles para 1 millón de afiliados de prepagas, que deberán abonar un extra de $ 5000 no reembolsable por práctica.
Así lo decidieron bioquímicos de la Provincia de Buenos Aires, que, a partir del 17 de enero comenzarán a cobrar un ‘bono adicional compensatorio’ a asociados de empresas de medicina privada que, según denuncian, pese a los aumentos anunciados en las cuotas de enero y febrero, aún no actualizaron los aranceles profesionales.
Las 11 prepagas en las que los socios deberán pagar este copago en la Provincia son Swiss Medical, Galeno, Avalian, Luis Pasteur, Osdepym, Osmecon, Amffa, Prevención Salud, Uno Salud, Escribanos y Federada 25 de Junio. Se suman a los profesionales de Córdoba, Mendoza y Catamarca que ya cobran este diferencial. Por ahora, las demás compañías y la Ciudad de Buenos Aires quedan exentas.
Claudio Cova, presidente de la Federación Bioquímica de la Provincia de Buenos Aires (FABA), explicó -según publica El Cronista– que la decisión tiene como objetivo no dejar de atender a los pacientes y poder afrontar los gastos que las prestaciones implican.
El doctor y titular de la entidad indicó que «en 2023, los salarios de los empleados de laboratorios nucleados bajo el Sindicato de Personal de Sanidad, según la paritaria de abril-diciembre, aumentaron un 137%; mientras que insumos y reactivos -la mayoría importados- sufrieron un incremento promedio del 360%, en tanto que el índice de Precios al Consumidor (IPC) interanual alcanzó el 211,4%«.
«El monto es insuficiente para hacerle frente al servicio que brindamos a los beneficiarios. Durante ese mismo período, la Superintendencia de Servicios de Salud (SSS) obligaba a las prepagas a trasladar, al menos, el 90% de los incrementos que les aplicaban a las cuotas de sus afiliados, que resultó ser un techo en los aumentos otorgados», consideró Cova.
Dado el reciente DNU 70/2023, que desregula la actividad de las prepagas sin estipular lo que les deben trasladar a los prestadores, los bioquímicos les solicitaron a las empresas una actualización arancelaria que cubra el costo de funcionamiento de los laboratorios a fin de brindar el servicio sin inconvenientes.
«Ante la respuesta insuficiente, se definió el cobro de un ‘bono adicional compensatorio’, no reintegrable, a cargo de los beneficiarios de $5000, que entrará en vigencia en los próximos días, afectando a cerca de 1 millón de bonaerenses», aseguró Cova.
El ‘bono adicional compensatorio’, no reintegrable y de $ 5000, deberá ser abonado por los afiliados de las prepagas.
La intención de percibir este copago fue comunicada en noviembre, cuando los bioquímicos informaron que empezarían a cobrar este plus en todo el país. No obstante, cada jurisdicción tomaría la decisión de plegarse.
La Confederación Unificada Bioquímica de la República Argentina (Cubra) se mostró a favor de la medida. María Cecilia López, titular de la entidad, planteó que «los bioquímicos están en riesgo de no mantener el normal funcionamiento de sus servicios» y resaltó que la incorporación de este bono de emergencia «es la única alternativa en un contexto de atrasos y desfasajes en los convenios». «El problema viene de arrastre, ya que nunca se trasladaron incrementos acordes al proceso inflacionario», precisó.
De esta forma, los bioquímicos se suman a profesionales de otras especialidades que decidieron aplicar un cobro adicional por fuera de las cartillas. Ya son más de 30 las asociaciones que, para contrarrestar la pérdida salarial, aplican este copago que para el personal de salud es un ingreso extra, pero para el usuario un costo más que golpea su bolsillo.