En Comodoro ya han sido rechazadas varias solicitudes del programa del Gobierno Nacional, Recuperación Productiva 2. Esto sumado a las restricciones horarias y de capacidad máxima, pone en jaque a una gran cantidad de puestos de trabajo, situación que se vive en todo el país.
El sector gastronómico sigue en alerta. La nueva restricción a la circulación en un horario clave para el rubro pone en serios aprietos nuevamente a restaurantes, bares y cervecerías.
Si bien en Comodoro se logró consensuar que el horario límite para la atención al público sean las 24h, principalmente bares y cervecerías pierden la franja con mayor facturación, sumado a que todos deben cumplir con el límite del 50% de ocupación de los establecimientos, capacidad que juega un rol clave en la cantidad de comensales que se puede recibir por día.
Pese a los cimbronazos, la mayoría de los comercios gastronómicos –sin contar los que cerraron definitivamente- lograron permanecer en pie con la totalidad de los trabajadores contratados previamente, lo que pudo lograrse en parte gracias al programa Reparación Productiva (Repro), lanzado por Nación para asistir a sectores con dificultades económicas y así sostener el empleo.
Según la zona, el Estado asiste con 8.000, 12.000 o 18.000 pesos por mes por cada trabajador habilitado de los comercios que lo requieran. Sin embargo, debido a una desactualización del programa, fue rechazada la solicitud de varios negocios gastronómicos que requieren esa asistencia del Estado para completar los salarios de sus trabajadores.
Es que para acceder a dicho programa se exige poder probar una reducción de los ingresos mensuales, consumo de gas y electricidad, de forma interanual. Es decir, que la facturación y consumo de gas y electricidad de un mes debe ser menor a la del mismo mes, pero del año anterior.
Ahí yace el conflicto: en abril del 2020 la gran mayoría de los negocios del rubro se encontraba cerrado por la cuarentena obligatoria establecida por el Gobierno Nacional, y los pocos que permanecieron abiertos lo hacían funcionando a través de la modalidad de Delivery y Take Away, lo que les significaba facturar menos del 10% de lo que percibían en un mes pre-pandemia. Además, al no recibir al público y mantener locales cerrados, el uso de electricidad era casi nulo, mientras que el uso de gas se vio notablemente reducido.
Abril del 2021 encontró a todos los comercios del rubro gastronómico que siguen en pie, trabajando a puertas abiertas y hasta el horario permitido, que varía según la región. Las luces de los salones volvieron a encenderse y las hornallas volvieron a estar ocupadas por ollas y sartenes para preparar los platos de los comensales. De este modo, con el simple hecho de poder atender al público, se supera fácilmente el monto facturado en abril del 2020, donde los ingresos fueron ínfimos; también el consumo de gas y electricidad es ampliamente mayor.
Esto pasa a ser el motivo principal para que las solicitudes enviadas desde el sector comenzaran a ser rechazadas, situación que ya se ha dado en Comodoro y que se repite a lo largo y ancho del país.
En palabras del presidente de la Asociación Hotelera y Gastronómica, Juan Manuel Fernández, “va a venir una ola de rechazos de este tipo de subvenciones, y ya lo estamos viendo en muchos socios que les rechazaron”, vaticinó en diálogo con El Comodorense Radio.
La incertidumbre aumenta al mismo tiempo que lo hacen las restricciones. “Estamos viendo cómo podemos hacer, porque tenemos locales al 50%, restricción horaria y sin la ayuda del Estado se nos va a hacer muy complicado pagar sueldos”, sostuvo Fernández. Este inconveniente, añade, “nos tomó por sorpresa porque pensamos que desde Nación iban a prever esto y parece que no”.
Restará saber cómo paliará el gobierno de Alberto Fernández esta situación. Mientras tanto, desde el sector anticiparon que “vamos a empezar a juntar información de todas las filiales del país y empezar a ver si podemos hacer algo unificado de esfera nacional” al mismo tiempo que sentenciaron: “No se puede afrontar el salario de los empleados sin el Repro”.