El gobierno anunciará finalmente este viernes la actualización del impuesto a las ganancias, uno de los reclamos realizados por Sergio Massa al ministro de Economía Martín Guzmán. Será a través de un acto liderado por Alberto Fernández, con el acompañamiento del jefe de Diputados y el funcionario.
Tras la difusión de la segunda carta pública de Massa a Guzmán para que instrumente “sin demoras” la actualización del impuesto a las Ganancias, un reclamo que alteró los sensores políticos de la Casa Rosada, el Gobierno reveló que trabaja en un proyecto de decreto que subirá el tope a partir del cual se tributa el gravamen, que no solamente excluirá a la primera cuota del aguinaldo a mitad de año, como demanda el jefe de Diputados, sino también a la segunda correspondiente a diciembre.
En Diputados, mientras tanto, aplicaban este jueves la vieja doctrina de “ver para creer” e incluso advirtieron que si hasta el próximo lunes Guzmán no cumple con lo que prometió, entonces Massa avanzará directamente con una modificación a la ley, que le quitaría al Poder Ejecutivo la facultad delegada por el Parlamento para actualizar el impuesto a las Ganancias.
En el caso del aguinaldo, según señaló el periodista de La Nación Mariano Spezzapria, la medida anticipada por Economía solamente beneficiará a los asalariados que queden excluidos del pago de Ganancias a partir de la próxima suba del mínimo no imponible. Según fuentes oficiales, el decreto se publicará en el Boletín Oficial “en los próximos días” y contemplará “además de la exención en el sueldo anual complementario”, la posible “ampliación del límite para que los trabajadores en relación de dependencia beneficiados no tributen el impuesto a las Ganancias”.
De este modo, la contestación de Guzmán no fue con declaraciones propias sino a través de voceros del palacio de Hacienda. Las fuentes consultadas precisaron que “la medida entrará en vigencia en el mes de junio”, con lo cual habrá una resolución de la AFIP que excluirá al medio aguinaldo del pago de Ganancias. En la cartera que conduce Guzmán deslizaron que los cambios se instrumentarán “más allá de que lo pida Massa”, aunque desde la Casa Rosada se preocuparon por marcar que “no hay ninguna disputa” entre el tigrense y el ministro de Economía, que había reaccionado con fastidio a la primera carta de Massa, al calificar la medida que reclamaba como una “obviedad”.
En la nueva carta dirigida a Guzmán fechada el 24 de mayo aunque difundida hoy, enviada con copia al presidente Alberto Fernández, Massa reclamó al ministro de Economía que “efectivice la delegación de facultades que este Congreso efectuó y proceda a incrementar” el piso de Ganancias, para llevarlo de los 225.000 pesos actuales a 265.000 pesos, con el objetivo de que los aumentos de las paritarias sindicales no terminen siendo contraproducentes para los trabajadores que pasan a tributar el gravamen.
Antes de enviar la segunda carta a Guzmán, Massa habló personalmente con Alberto Fernández sobre el tema. De hecho el miércoles lo acompañó al Tedeum por el 25 de mayo en la Catedral metropolitana y luego viajaron juntos en el helicóptero presidencial hacia Florencio Varela, donde participaron de un locro organizado por el Movimiento Evita. El apuntado por Massa fue siempre el ministro Guzmán y no el primer mandatario.
“Reitera solicitud. Impuesto a las Ganancias. Alivio fiscal para trabajadores y jubilados. Incremento de las deducciones del impuesto en virtud de los nuevos supuestos macroeconómicos y salariales en el marco de las facultades delegadas en el artículo 5° de la Ley N°27.667″, sostiene el asunto de la nueva que Massa dirigió a Guzmán, que la presidencia de la Cámara de Diputados envió con copia a la Casa Rosada.
Más de 100.000 perjudicados
En el texto que lleva la firma de Massa se indicó que “a febrero de 2022, la cantidad de trabajadores y jubilados retenidos en el impuesto a las Ganancias era de 742.964″, aunque ese número de personas trepó notoriamente “a 847.878 en el mes de abril del corriente año”, lo que representa “un incremento del 14 por ciento en solo dos meses”. El efecto de las paritarias y de los aumentos jubilatorios tuvo así su contrapeso con este gravamen.
En el párrafo final de la carta, Massa le recordó a Guzmán uno de los objetivos compartidos por los máximos referentes del Frente de Todos, la coalición gubernamental: “De esta manera, entendemos que se dará sostenibilidad a las políticas de este gobierno a mantener el poder adquisitivo de los trabajadores y jubilados; y fortalecer la consolidación de la demanda y el mercado interno nacional”, sostuvo el tigrense.
La ley aprobada por el Congreso en abril de 2021 permite considerar las pautas salariales y faculta al gobierno a través de un decreto a actualizar el “piso” del gravamen. Originalmente se fijó en 150.000 pesos y luego se lo ajustó a 175.000 pesos. Por efecto de la inflación, el parlamento volvió a delegar la facultad al Poder Ejecutivo para incrementar las deducciones del impuesto durante 2022 y el mínimo se fijó en 225.000 pesos desde enero.
Después de enviarle a Guzmán la segunda carta, Massa participó este jueves de un acto junto a Sergio Berni, el ministro de Seguridad bonaerense, en la localidad de Las Heras. Desde allí, el jefe de Diputados insistió con otro mensaje directo a Guzmán: “El desafío es que el Estado haga un esfuerzo a la par del que hacen el trabajador y el empresario, que paga esos salarios para que todos podamos recuperar esos 20 puntos que perdieron nuestros trabajadores entre el 2015 y el 2019″.
En la misma línea, Massa dijo estar “convencido” de que “para que el aguinaldo y los salarios en el segundo semestre tengan mayor peso en términos de ingreso, el Estado tiene que subir el piso o bajar el peso del impuesto a las ganancias en los salarios”. Y remató: “El salario no es ganancia, es remuneración por el trabajo realizado por el trabajador”.
Desde el interior bonaerense, el tigrense también le reprochó a Guzmán el aumento de la inflación “por encima de lo previsto en las proyecciones presupuestarias”. En ese punto afloró el cuestionamiento de fondo que un amplio sector de la coalición gobernante le hace al ministro de Economía: la constatación de que el poder adquisitivo de los argentinos se destruye por el alza de precios que la gestión del joven funcionario no atina a moderar.