Pablo González, titular de la petrolera estatal, dijo que la inestabilidad del precio internacional no le permite establecer un cronograma de aumentos en el precio de los combustibles para 2022.
El presidente de YPF, Pablo González, dijo este sábado que no puede prever cuánto aumentará la nafta este año. Este año, la petrolera de bandera ya subió un 9% promedio en los precios de los combustibles en el surtidor.
“El año pasado hicimos un anuncio sobre los aumentos del año. Este año no estamos en condiciones de hacer los mismos anuncios que hicimos el año pasado”, sentenció González en declaraciones a AM750.
El funcionario se refería a los incrementos escalonados de 5% que se hicieron en marzo, abril y mayo. “El año pasado, los combustibles aumentaron un 28,3% promedio frente a una inflación de 50,9%. Esto ha determinado una presión sobre toda la cadena de comercialización de los combustibles”, sostuvo González.
Cuando le consultaron si la estimación oficial de 30% de aumento para los precios del combustible que había circulado se mantiene, el titular de YPF evadió: “Vamos a ver”. Y agregó que dependerá de la evolución de la inflación y del precio internacional del petróleo, que está en máximos desde 2014.
Sobre el aumento de febrero, resaltó que “fue el primero de los últimos 8 meses”, pero dijo que “está en proceso de revisión” porque el precio del combustible depende de factores internacionales, ya que el petróleo es un commodity que tiene su propia volatilidad.
Por otra parte, reconoció que el precio interno quedó en valores bajos en la comparación regional, una situación que se volvió crítica en la ciudades fronterizas. “En las provincias que tienen tránsito de un país a otro, vienen a buscar combustible a la Argentina y lo van a vender a otros países”, reconoció González.
Y admitió que esa es la razón detrás del aumento más fuerte de la nafta en la provincia de Misiones, donde el precio subió entre 14% y 18% en lugar del 9% que promedió en el país. “Eso ha determinado a poner un precio diferencial para los extranjeros y un cupo en Misiones porque vienen a la Argentina a cargar combustible y, además, se llevan bidones. Es una venta ilegal. Ahí haría falta un poquito más de control”, aseguró.
La incertidumbre por el precio internacional del petróleo
El barril de petróleo Brent cerró la semana al borde de los $94 dólares y algunas estimaciones ya prevén que llegue a los US$100. Ese valor es uno de los componentes que según González presionan sobre el mercado interno.
“El Brent, desde el año pasado, ha crecido de manera exponencial. YPF abastece el 55% de la venta de combustible del país. Es una empresa integrada, es decir, que explora, perfora, produce, transporta, refina y vende, pero, salvo Pan American Energy a través de Axion, el resto tiene que comprar crudo. Y eso lo puede comprar en el mercado interno o lo tiene que importar a precio Brent”, explicó González.
En esa línea, destacó que “hoy no tenemos vigente ninguna norma que determine un barril criollo” y dijo que en 2021 “se trató de ir amortiguando la presión del Brent sobre el mercado interno, cuando estaba US$75 y ahora está arriba de US$90″.
“Eso determina que aquel que tiene que importar para vender, está en serias dificultades. Es decir, que presiona al mercado interno el aumento del Brent porque la Argentina está consumiendo más de lo que produce; todavía no tiene una producción total que llegue al autoabastecimiento”, completó González.
Durante 2021, el Gobierno postergó en varias ocasiones un aumento en los impuestos a los combustibles líquidos para contener la suba de los precios en el surtidor. González dijo que esa decisión permitió reforzar las inversiones de la compañía y aumentar fuertemente la producción.