La cotización de futuros para el barril de crudo West Texas Intermediate (WTI), de referencia para Estados Unidos, sufrió un desplome histórico, ya que cayó 300% y lo dejó en torno a los U$S-37,63. Representantes del sector afirman que es «poco probable» que el precio final de los combustibles en Argentina sufra alguna modificación.
Este lunes 20/04 será recordado como un día negro para la industria de los hidrocarburos, ya que el crudo West Texas Intermediate (WTI), de referencia para Estados Unidos, cayó 300% y pasó a cotizar en terreno negativo U$S-37,63.
El presidente de la Confederación de Entidades del Comercio de Hidrocarburos y afines de la Argentina (CECHA), Gabriel Bornoroni, le dijo a Ámbito: «Es muy poco probable que el precio final de los combustibles baje porque correrían riesgo los puestos de trabajo del sector petrolero, principalmente de Vaca Muerta, donde produce petróleo no convencional».
«La prioridad son los puestos de trabajo, antes que baje el precio en el surtidor. Que baje $1 no le hace al mejoramiento de la economía, pero sí hace daño al puesto de trabajo, hasta sería contraproducente», agregó.
El crudo Brent es el punto de referencia mundial y para la Argentina cayó solo un 5%, a US$ 26,50. Este es otro motivo por el cual el precio de la nafta no baja: todavía no se desplomó -consigna Urgente24-.
En el Gobierno se habla de la instalación de un barril «criollo» para cuidar los puestos de trabajo y otras medidas para sostener la actividad en los yacimientos. De acuerdo a Econojournal, un borrador establece ese precio sostén en torno a los US$45,
El presidente de la federación santafesina FAENI, Alberto Boz, le dijo a Ámbito que «para tener un precio sostén de la actividad en el sur argentino y por el parate de Vaca Muerta, que al no ser convencional, necesitaba un piso de 45 a 50 dólares para funcionar. Con lo que está pasando hoy vamos a estar muy complicados».
Un antecedente de precio local del petróleo se implementó a fines de 2014, durante el mandato de Cristina Fernández de Kirchner. En ese momento se fijó a USD 77 para proteger a la producción local de una baja del precio internacional.
Entre 2003 y 2014, a través de distintos mecanismos, los precios locales del crudo se habían mantenido más bajos que la referencia internacional que superaba los USD 100. En 2017, durante el gobierno de Mauricio Macri, se fue nuevamente hacia los precios internacionales.
De todas formas, trascendió que los gremios más fuertes en los yacimientos han aceptado la reducción de un 70% de los salarios a los trabajadores, con la condición de asegurar el trabajo. Esto representaría de cobrar de 105 mil a 35 mil pesos, según contó el secretario General del Sindicato del Petróleo, Guillermo Pereyra, en una entrevista radial.