La inflación de mayo podría finalizar con una variación de entre 6% y 7% mensual tras la postergación de aumentos previstos para el mes que definió el Gobierno, según las últimas proyecciones privada. Ese nivel no se registraba desde mediados del año pasado, indica Infobae.
Las consultoras advierten que el dato estará explicado por un freno al fuerte ajuste fiscal-monetario y al ordenamiento de precios relativos que caracterizaron los primeros meses del presidente Javier Milei. La definición que suele darse es la de “inflación reprimida”, que también se da en el marco de una fuerte caída del consumo.
El ministro de Economía, Luis Caputo, afirmó que están cómodos con el superávit fiscal por lo que la prioridad es apuntalar el sendero de desaceleración del Índice de Precios al Consumidor (IPC) del Indec y “no cargar con gastos de momento a la clase media”.
Es por eso que en mayo se definió una suspensión del los incrementos previstos en tarifas de luz, gas, impuesto a los combustibles y boletos de colectivos. También se sumó la medida que obligó a las prepagas a retrotraer precios que estuvieran por encima del IPC.
La consultora Eco Go,que conducen Marina Dall Progetto y Sebastián Menescaldi, estimó para abril una inflación del 8,8% y para mayo esperan un 4,2% mensual. El cálculo tiene que ver con que la postergación de incrementos de este mes restaría casi 2 puntos al IPC.
Para Econviews,de Miguel Kiguel,mayo se ubicaría en el 7% mensual. “Pero esto no es una baja genuina de la inflación sino represión. Eventualmente la suba de mayo vendrá más adelante, así que es un poco más de pan para hoy, hambre para mañana. Entendemos la lógica de buscar un menor índice ahora para asegurar lo ganado hasta acá. Con una nominalidad más baja la inercia puede ser más baja y que la magia del interés compuesto haga el resto”, destacó la consultora.
Por su parte, Invecq advirtió: “Desde un análisis de precios relativos, esta última medida podría forzar una desinflación a expensas de mantener una estructura de precios relativos distorsionada. De esta forma, se percibiría una desinflación artificial e irreal, que se genera de manera rápida pero transitoria”.
El ex ministro de Economía, Domingo Cavallo, estimó que para mayo el IPC podría arrojar entre 6% y 7%, “porque la tendencia que anticipan los precios online ubica a la tasa en el 5% y el efecto de los reajustes remanentes de precios y tarifas controlados, que el ministro de Economía ha dispuesto que sean más espaciados, probablemente se ubiquen entre 1 y 2 puntos porcentuales”.
El economista, de referencia para el presidente Milei, sostuvo que ese nivel será un piso a menos que el Gobierno clarifique el proceso de salida del cepo.
La expectativa de los inversores en el mercado se mantiene en línea con la del Gobierno. Así lo muestra un indicador que se conoce como inflación implícita. El ejercicio es posible a través del cálculo de la tasa de inflación que dejaría indiferente a un inversor entre posicionarse en una Lecap (renta fija) y comprar un título ajustado por inflación (CER).
En definitiva, responde a la pregunta: ¿Cuánto tienen que pagar los bonos CER para rendir lo mismo que uno a tasa fija? (los rendimientos son esperados, no asegurados)
Al respecto, el útlimo informe de perspectivas de mayo de Adcap Grupo Financiero consignó: “Las Lecaps ya descuentan tasas de inflación por debajo de 4% hacia fin de año, lo que podría ser demasiado optimismo. No pocos economistas creen que la inflación podría encontrar rigideces a la baja en torno al 4%/5% mensual”.
El IPC mensual había marcado 25% en diciembre, pasó al 20,6% en enero, al 13,2% en febrero y el último dato oficial arrojó 11% en marzo (288% interanual y 51,6% acumulado en el primer trimestre). La expectativa oficial es que en abril el indicador puede mostrar un dígito por primera vez en cinco meses o al menos quedar muy cerca de ese registro.
Para mayo la inflación podría ubicarse entre el 6% y 7% según las consultoras. La última vez que había tocado esos niveles fue en junio (6%) y julio (6,3%) del 2023.
“Nuestra proyección para el mes de mayo apunta a que el IPC registrará una variación en torno al 7%, con un IPC núcleo moviéndose en torno al 5% mensual. De esta forma, el índice de precios se está moviendo a una velocidad similar a la que sostenía durante la primera mitad del 2023″, publicó la Fundación Libertad y Progreso.