Vecinos habían denunciado a una pareja que intentaba abrir la puerta de su casa: en realidad, se habían confundido de piso y querían ingresar a la fiesta sexual.
Una persona denunció a una pareja que forzaba la puerta de su vivienda para ingresar: cuando la Policía llegó, los sospechosos les explicaron que querían ingresar a una orgía, que era en otro piso.
De esta manera, las autoridades de la localidad Llissá de Munt, en Barcelona, dieron con una orgía de más de 70 personas, la cual violaba las medidas restrictivas de coronavirus en la región.
Al número de participantes se llegó sin contar las personas que estaban «en el piso de arriba practicando sexo», explicó la Policía, quien extendió que los protagonistas eran «todos americanos, con prostitutas» que habían alquilado esa vivienda para una fiesta de fin de año.
La propietaria del inmueble habría autorizado el festejo. Ahora, el caso está a cargo del Departamento de Interior, que determinará las sanciones correspondientes si llega a comprobarse que hubo una violación de las normativas de salud vigentes.
Fuente: El Mundo