El ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, remarcó la “estabilidad” con respecto al último período y destacó las ayudas a través de planes. Aseguró que el objetivo este año será “reconstruir el empleo”.
Según publican desde Infobae tras conocerse el índice de pobreza que publicó hoy el INDEC –42%– el Gobierno admitió que se trata de una situación “crítica”, remarcó que se mantiene “estable” con respecto al período anterior y destacó las ayudas económicas que distribuye el Ministerio de Desarrollo Social.
En el año electoral, mantener al margen la inflación y lograr mejoras en la percepción de la economía son los ejes principales del Gobierno junto al plan de vacunación.
El ministro de Desarrollo Social, Daniel Arroyo, atribuyó la alta cifra de pobreza a la inflación y la situación “estructural”. “El problema es el precio de los alimentos. En los últimos meses hay más changas, un albañil gana entre 700 y 800 pesos por día”, señaló, en una crítica solapada a los formadores de precios.
Con poco menos de la mitad de la población del país sumida en la pobreza, Arroyo consideró “crítica” la situación social. Pero señaló, en un reconocimiento a la gestión del Frente de Todos, la “estabilidad” de la cifra con respecto al último semestre. El 2020 fue un año devastador para la economía por la extensa cuarentena que afectó principalmente a los estratos de menor poder adquisitivo. En los momentos de mayor suspensión, llegaron a recibir el Ingreso Federal de Emergencia 11 millones de personas, que a medida que se retomaron las actividades por la progresiva apertura a partir de la baja de casos de coronavirus, se eliminaron.
Desde entonces, confía en contener la grave situación social y alimentaria con los planes y programas que siguen vigentes, desde la Asignación Universal por Hijo (AUH), a Potenciar Trabajo. Arroyo pone en esta última iniciativa el grueso de sus expectativos.
Mientras tanto, el proyecto de “salario universal” inspirado en propuestas de distintos sectores sociales del Frente de Todos e inclusive del papa Francisco, que el Gobierno estudió el año pasado, quedó enterrado.