La longitud del excremento le jugó una mala pasada.
Un vecino del Reino Unido salía de su casa cuando desde lejos pudo apreciar lo que pensó que era una serpiente en su patio.
Con el temor de ser atacado, y de si llegara a ser venenosa, el hombre tomó todas las precauciones posibles antes de salir de su casa.
Así fue que luego de dejar pasar unos minutos, se dio cuenta que la supuesta serpiente no se movía del lugar, por lo que llegó a pensar que estaba muerta.
Cargado de coraje salió de su casa para averiguar de qué especie sería la víbora, aunque se encontró con una particular sorpresa.
Al acercarse constató que no se trataba de un reptil, sino de la caca de su perro, que había dejado en el suelo un excremento de importante longitud.
La situación se tornó cómica para él y dejando atrás los nervios, fotografió lo que se veía desde su ventana y lo que finalmente terminó siendo. Las imágenes las compartió en las redes sociales donde, como no podía ser de otra forma, se viralizaron en todo el mundo.