El sargento primero Sandro David Viltes fue quien el domingo 3 de noviembre hirió a tres personas en las piernas para evitar la usurpación de una vivienda ubicada en Código 2461 y Código 2456. Ahora fue pasado a disponibilidad preventiva por el jefe de la Policía del Chubut, Miguel Gómez. El presentará un pedido de reconsideración.
El sargento primero Sandro David Viltes, acusado de “abuso de armas con lesiones graves en dos hechos” por balear a tres personas en Standart Norte el domingo 3 de noviembre en un intento de usurpación, fue pasado a disponibilidad preventiva por el jefe de la Policía, Miguel Gómez.
“Fue a hablarnos y nosotros le dijimos que se vaya porque él no era el dueño y tampoco estábamos en su casa y él se apareció con el martillo y nosotros al decirle que se vaya seguimos con lo que estábamos haciendo; se va a su domicilio a buscar el arma y después va y en ningún momento dice nada. Mi papá no lo agrede, tira un tiro al aire, discuten con mi papá y le hace el disparo; empezamos a salir corriendo y empezó a tirar a lo loco”, denunció Macarena Leiva cuando ocurrió el incidente. Ella fue una de las tres víctimas del policía que se hallaba fuera de servicio cuando actuó.
Además de a Macarena, el sargento hirió a su padre Armando Leiva y a Emilio López Navarrete. Fue en la calle 2456, número 1456.
“Me dio ganas de pegarle un tiro en la cabeza, que lo podría haber hecho, pero no lo hice”, declararía suelto de cuerpo el policía ante el juez Alejandro Soñis en la audiencia de control de detención donde fue imputado de abuso de arma en concurso real con lesiones graves en dos hechos, recuperando la libertad con la prohibición de acercarse a las víctimas.
Incluso se supo allí que de acuerdo a lo que investiga la Fiscalía el policía frente a los efectivos de Kilómetro 8 que habían llegado a detenerlo, le disparó de manera intimidatoria al suelo a la mujer que le recriminaba haberla baleado.
“No es que tiró cuatro tiros, como dice. Mi papá tiene un tiro en cada pierna, mi cuñado tiene un tiro en cada pierna, y a mí me tiró; tengo roces en las piernas, uno en el muslo que entró y salió”, contó la joven.