El ex presidente de Brasil acusó al mandatario de comportarse como si fuese el dueño de la producción de ese fármaco. El ultraconservador autorizó el tratamiento del Covid-19 con él pese a las dudas sobre su efectividad, comenta Ámbito.
El expresidente de Brasil, Lula da Silva, afirmó este jueves que sospecha que el actual mandatario del país, Jair Bolsonaro, «inventó» tener coronavirus para «hacer propaganda» de la hidroxicloroquina.
«Creo que Bolsonaro inventó que estaba contaminado para hacer propaganda del remedio», dijo el exmandatario de izquierda (2003-2010) en una conferencia de prensa virtual con corresponsales extranjeros desde San Pablo.
«No sé si es socio, pero se comporta como si fuese el dueño de la fábrica que produce ese remedio e intenta venderlo», agregó Lula, quien calificó de «irresponsable» a Bolsonaro por su gestión de la pandemia de coronavirus en Brasil. «Por eso estamos viviendo esta situación, de la que no veo una salida a corto plazo», afirmó.
Bolsonaro, de 65 años, anunció el 7 de julio haber sido diagnosticado con Covid-19 y cumplió su agenda desde su residencia oficial en Brasilia hasta el 25, cuando el tercer test sobre la enfermedad dio negativo.
Durante ese período realizó varias apariciones públicas en las que mostraba una caja de hidroxicloroquina, un medicamento cuya eficacia contra el coronavirus no está científicamente demostrada, pero que su gobierno autorizó como tratamiento para la enfermedad.
Este jueves, la Presidencia brasileña anunció que la primera dama, Michelle Bolsonaro, también dio positivo por coronavirus.
Desde el inicio de pandemia, que ya dejó más de 90.000 muertos en Brasil, Bolsonaro criticó las medidas de confinamiento decididas por los gobernadores, por su impacto económico, y llegó a calificar a la enfermedad de «gripecita».
Lula, confinado desde marzo en su departamento en San Bernardo do Campo, en las afueras de San Pablo, también cuestionó la relación de Bolsonaro con su par estadounidense Donald Trump, de quien se ha dicho fan.
«Bolsonaro se comporta, el ministro de Relaciones Exteriores (Eduardo Araújo) se comporta como un chupamedias. Nunca vi una dependencia y un servilismo como el del gobierno Bolsonaro con Estados Unidos», dijo el líder histórico del Partido de los Trabajadores (PT).
La posibilidad de que el republicano Trump sea derrotado por el demócrata Joe Biden en las elecciones de noviembre podría dar otra perspectiva a algunos aspectos de la relación bilateral entre las dos mayores economías del continente, según Lula.
«Un nuevo gobierno podría cambiar de actitud y exigir que Brasil respete la democracia, los derechos humanos y adopte una política que evite la deforestación de la Amazonia», afirmó.
Lula, que dejó el gobierno en 2010 con altos índices de popularidad, espera en libertad el resultado de un recurso contra una pena de casi 9 años de cárcel por corrupción, que cumplió parcialmente entre abril de 2018 y noviembre de 2019.