Durante la entrevista, Mansilla comentó que, tras una conversación con el comisario local, se discutió la creación de un «corredor seguro» que abarque no solo a la Escuela 711, sino también a otras instituciones educativas de la zona.
Mansilla destacó que el comisario se comprometió a coordinar con las autoridades de tránsito para mejorar la circulación en la zona, ya que la calle que rodea la escuela es estrecha y el estacionamiento en ambos lados dificulta el tránsito. «La mayoría de los padres quieren asegurarse de que sus hijos entren bien a la escuela, y muchos deben dejarlos en la esquina, lo que genera preocupación«, explicó.
Si bien el corredor seguro está en funcionamiento, Mansilla señaló que la falta de personal es un problema. «Nos aclararon que el personal es escaso, y eso complica la vigilancia«, comentó, sugiriendo la necesidad de más recursos para garantizar la seguridad.
En cuanto a la iluminación, la madre mencionó que recientemente se realizaron reparaciones, pero que la luz sigue siendo tenue. Aunque los incidentes de inseguridad han sido aislados, Mansilla subrayó la importancia de no esperar a que ocurra un hecho grave para tomar medidas. «No queremos volver a pedir justicia, queremos que los corredores seguros se mantengan de manera constante», afirmó.
La conversación también abordó la presencia de «trapitos» en la zona de la Avenida Kennedy, lo que genera inquietud entre los padres. Mansilla hizo un llamado a las autoridades para que se preste atención a estos temas y se actúe preventivamente.
Finalmente, Mansilla mencionó que en un caso reciente de robo, los padres afectados no presentaron una denuncia, lo que dificulta la actuación policial. La directora de la escuela señaló que sin denuncias formales, la policía no puede acceder a las cámaras de seguridad para investigar los hechos.