Un episodio insólito ocurrió en un vuelo que partía desde Miami, Estados Unidos, hacia Londres, Inglaterra. Un pasajero se incomodó por las reiteradas flatulencias de su compañero de asiento y obligó a los tripulantes de cabina aterrizar el avión, publicó TN.
Como primera medida, ante el disgusto que le ocasionó el olor de la persona que estaba a su lado, el hombre llamado Daniel Becon decidió cambiarse de asiento. Sin embargo, el personal a bordo le indicó que debía regresar a su ubicación.
El pedido del personal aéreo desató la furia del pasajero y agredió al asistente de vuelo. “Becon respondió con malas palabras y después golpeó al tripulante en la cara con el puño, lo que provocó que el asistente se cayera y se golpeara en la cabeza”, explicaron fuentes que estaban en el avión.
“El piloto decidió regresar al aeropuerto de Miami para que Becon fuera entregado a la justicia. Finalmente, el hombre reconoció que todo fue provocado debido a las flatulencias de su compañero de asiento y quedó en manos de la policía”, enfatizaron.
La secuencia se viralizó en las redes
En las redes sociales, los usuarios debatieron lo sucedido: mientras que unos defendieron el comportamiento de Daniel Becon por la intoxicación de los gases; otros lo condenaron y estuvieron de acuerdo en que debería pagar una reparación.
“Podría alegarse locura temporal o intoxicación, por inhalación de gases”, “Imagínate un vuelo transoceánico con eso al lado”, “Solo era abrir las ventanas”, “¿Qué necesidad?, era más fácil decir lo que pasaba que tirar trompadas y escupitajos a la tripulación. Persona no grata”, fueron algunos de los comentarios.