El procedimiento es realizado vía telefónica con el fin de obtener el código de verificación en dos pasos del servicio de mensajería.
El pasado 9 de marzo, una pareja fue hackeada por autores desconocidos que primero se hicieron pasar por trabajadores del Ministerio de Salud.
En comunicación con EL COMODORENSE, Sofía relató que aquel día “llaman de parte del Ministerio de Salud diciendo que por favor no acerquemos al centro de salud más cercano para retirar el nuevo carnet de vacunación de color amarillo”.
En ese instante del otro lado del teléfono indicaron que llegaría una llamada mediante la cual brindarían el código de carnet que tendrían que utilizar para poder retirarlo.
Efectivamente ingresó la nueva llamada donde una voz automática dictó los 6 dígitos. Los estafadores pidieron ese número “para registrarlo en el sistema y poder retirar el carnet”.
Sin embargo, todo se trataba de una vil estafa. Al cabo de unos pocos minutos, una amiga llamó por celular preguntando si la pareja le estaba pidiendo plata desde el celular del marido de Sofía.
Enseguida chequearon el WhatsApp de Franco, constataron que alguien había ingresado desde otro dispositivo: el código que les había llegado era de la verificación de dos pasos, procedimiento de la aplicación para evitar hackeos.
Pasaron 12 horas hasta que Franco pudo recuperar su cuenta, y en ese lapso el estafador contactó a todos los familiares y amigos que hallaba, pidiendo dinero con diversas excusas haciéndose pasar por él.
“¿Tenés algo de plata para prestarme hasta mañana?”, se podía leer en las capturas que los receptores de los mensajes iban enviando a Sofía, para confirmar si se trataba de un pedido real o una estafa.
Una de las personas a las que el estafador quiso robar, se dio cuenta de la maniobra fraudulenta cuando leyó que el dinero no iría a la cuenta de la persona que lo pedía.
Cabe recordar que nunca se debe transmitir información personal a través de llamadas o mensajes de texto que comprometan la integridad económica de alguna persona.
Un banco, institución del estado o empresa de mensajería nunca requerirá claves o datos personales a través de una llamada.
En caso de que una persona se comunique vía telefónica y pida alguna información privada, deberá cortar la llamada y denunciar el número de inmediato.
