El líder del sindicato petrolero neuquino, Guillermo Pereyra, pidió que se reúna la mesa que firmó la adenda. Reiteró que hay empresas que no atacaron la conciliación y llamó a un encuentro de todas las partes para planificar el futuro del sector.
Luego de que el gobierno nacional dictará la extensión de la conciliación obligatoria por los 600 telegramas en Vaca Muerta, el líder del Sindicato de Petroleo y Gas Privado de Río Negro, Neuquén y La Pampa, Guillermo Pereyra, apuntó contra una de las empresas y pidió que se haga una reunión con todas las partes para planificar el futuro del sector.
«Esta conciliación fue violada por Schlumberger, que en lugar de regresar al estado anterior al conflicto, no lo hizo. Los mandó a la casa, que significa reducirles el salario, no cobran como los que están en actividad. Y no cumple con la ley», dijo el gremialista en una entrevista con LU5.
Pereyra manifestó: «no hay motivos para los despidos, cuando los equipos están trabajando 12 horas, las dotaciones salen incompletas y no se dieron las vacaciones: hay empresas que tiene dos o tres periodos atrasados».
El líder sindical anunció que van a pedir una audiencia con el ministro de Trabajo con el próximo gobierno pero además llamó a que se realice una reunión con la mesa que firmó la adenda compuesta por el poder ejecutivo nacional, provincial, los presidentes de las empresas y los secretarios generales de las dos organizaciones sindicales. «Es necesario para saber que va a pasar con el desarrollo de Vaca Muerta», agregó.
Pereyra afirmó que no se van a tener precisiones sobre el desarrollo del sector hasta dentro de dos o tres meses, mientras tanto «que esté todo tranquilo, que no se despida», dijo. «Se pueden dar vacaciones, francos compensatorio. No es ir al conflicto, es sentarse y discutir y pensar el desarrollo de Vaca Muerta, que trae trabajo y bienestar», añadió.
Consultado sobre la situación en Schlumberger, dijo que el gobierno va a investigar lo sucedido y si no cumple con lo firmado están estipuladas fuertes multas.