Luego de la reunión de la mesa nacional del Frente de Todos, el ministro de Economía, Sergio Massa, reafirmó su compromiso con “bajar la inflación” y aclaró que continuará con su tarea más allá del resultado de algún partido, publicó Infobae.
Lo dijo en referencia al último dato de inflación que se conoció la semana pasada y afirmó que se enfoca en alcanzar la meta del 60% anual. Además, habló de la necesidad de que políticos, empresarios y líderes económicos se sienten en una mesa a dialogar sobre el lo que viene. “El futuro de la Argentina puede ser bueno dependiendo de la madurez de su dirigencia política”, sostuvo.
Durante una entrevista con María O’Donnell y Ernesto Tenembaum en el programa Conecta2 de CNN, Massa explicó: ”El objetivo de bajar a la mitad de la inflación que recibimos, que es un poco el mensaje inicial que dimos nosotros, no cambió”. En ese sentido, mencionó que asumió con una inflación de 7,4 por ciento, con reservas negativas, con un “enorme deterioro de la balanza comercial”, así como también con “precios absolutamente desacomodados”.
“Ningún resultado de un partido me va a sacar de la pelea por el campeonato de bajar la inflación porque soy hincha de un equipo chico y aprendí que la carrera es larga”, aseguró al ser consultado por la falta de confianza de la sociedad. Massa continuó al decir: “Yo no planteo debates de negación de la realidad; al contrario, creo que mi responsabilidad es sobre la base de la realidad que tenemos tratar de poner sentido común y tomar las mejores decisiones para que superemos este contexto y para que tengamos”.
Además, agregó que “consciente de que la sociedad entiende que el presidente de la Cámara de Diputados se haya sentado en un Ministerio de Economía que absorbió Agricultura, Energía, Industria y Comercio se haga cargo de exportación e importación, del control de los impuestos, del tema de las exportaciones mineras o de la situación de los hidrocarburos o del campo, a la par de tener que administrar el presupuesto y las finanzas internacionales de la Argentina, es emergente de una crisis”.
Por esto mismo, reconoció que una de las cosas más difíciles del hecho de ser ministro es “administrar la expectativas”. “Yo administro la realidad con sentido práctico”, sostuvo al ser consultado sobre el objetivo de reducir la inflación mensual a 3 puntos porcentuales para abril.
Las declaraciones del ministro se dan días después de que se diese a conocer el dato de la inflación de enero. De acuerdo con los datos del Instituto de Estadísticas y Censos (Indec), el índice de precios al consumidor del mes pasado fue del 6 por ciento promedio, pero el rubro de los alimentos fue uno de los que más incremento registró, puesto que aumentaron 6,8 por ciento su valor.
Con respecto a esta situación y la meta establecida para el cuarto mes del año, explicó que, al planificar, no existía la sequía que produjo que se modificara un 60 por ciento el precio del tomate. “Argentina es un país agroexportador. [La sequía] Te modifica la balanza comercial y la fiscal porque el campo es el sector que más pone en impuestos en Argentina”, planteó.
Además, precisó que “la mayor tensión se da en diciembre y en marzo, son los dos meses donde hay mayor estacionalidad”. A modo de ejemplo, mencionó como “fundamental” el índice de fruta y verdura y expuso que, con la sequía, “hay mucha menos oferta”. “La carne que venía todo el año, con un aumento del 60 por ciento contra el 90 de inflación y tuvo una recuperación de precio, también impactado por la sequía”, dijo antes de destacar un programa que apuesta por el aumento de la oferta de los próximos cuatro meses.
Pese a que aclaró que “bajar la brecha del 110 al 30 supone cosas que son imposibles de hacer sin generar dolor”, tildó de “posible” que se alcance la meta del 60 por ciento de inflación para este año. Así, consideró: “Nuestra responsabilidad es tratar de hacer las correcciones que tenemos que hacer, pero evitando la mayor cantidad de dolor”.
Tras las explicaciones de Massa, O’Donnell y Tenembaum consultaron al ministro de Economía qué es lo que le falta al plan que implementa el Gobierno. Frente a esto, Massa respondió: “Esterilizar más pesos. Significa que todo ese volumen de pesos que digamos la City va transformando a veces en contado con liquidaciones, digamos en distintas operaciones”.
En relación con esto, el titular de la cartera económica precisó que “el problema no lo tenés en cuánto representa el sector público en el mercado en término de pesos, sino en cuánto de lo que representó el sector público quedó en la calle dando vueltas y se transformó en un instrumento de espiralización de operaciones financieras y de dolarización”. Massa confirmó que el Gobierno “puede hacer” algo contra estos instrumentos para seguir “consolidando el camino de esterilización de pesos” y adelantó que, en los próximos días, se conocerán medidas al respecto.
Madurez de la dirigencia política
El ministro de Economía alentó a la generación de consensos para alcanzar un objetivo de crecimiento. Remarcó la necesidad de que los líderes políticos, económicos y empresarios se sienten a una mesa. “Argentina tiene una enorme oportunidad los próximos diez años en el mundo en el que vivimos”, destacó.
“El tema es que tengamos la capacidad los dirigentes políticos, los dirigentes económicos, los sectores empresarios y los sectores del mundo del trabajo, de sentarnos a una mesa y decir: ‘en estos cuatro, seis u ocho temas, no jodamos, porque está en juego el futuro de la riqueza argentina’”, completó.
Además, destacó que “Argentina tuvo una ventana de oportunidad hace un poquito más de 100 años, tuvo una ventana de oportunidad después de la Segunda Guerra Mundial”.
Y en ese sentido concluyó: “Hoy aparece una tercera ventana de oportunidad enorme. Está en nosotros que tengamos la capacidad de aprovecharla o que la dilapidemos como hemos dilapidado otras oportunidades.”
Massa, de cara a las elecciones presidenciales
Tras sus declaraciones sobre la situación económica actual del país, el ministro de Economía tildó de “incompatible” su tarea al frente del Ministerio y una candidatura presidencia, por lo que afirmó: “Me parece que en todo caso, lo que hay que hacer es cumplir con los objetivos que la sociedad espera que cumpla. No correr atrás de la búsqueda de nada distinto a lo que tengo que hacer hoy”.
De igual forma, aseguró que tiene una “responsabilidad política como líder del Frente Renovador, como parte integrante de la conducción de la coalición” y remarcó: “No me asigno ningún rol más allá del que tengo, pero creo que la cuestión electoral y ser ministro de Economía es incompatible en Argentina”.
El pasado jueves el Frente de Todos se reunió en la sede del Partido Justicialista nacional (PJ) para comenzar a delinear una estrategia política de cara a las elecciones presidenciales de este año. Aunque no se definieron candidatos, fórmulas o preferidos, este encuentro funcionó como un primer acercamiento luego de meses de dura interna. Massa participó de la cumbre, convocada por el presidente Alberto Fernández, junto con el líder de La Cámpora, Máximo Kirchner, y el ministro del Interior, Eduardo “Wado” De Pedro.
El titular de la cartera económica se refirió al partido oficialista como “competitivo”: “Puede ser más competitivo electoralmente, si yo hago las cosas bien y si el resto también cumple con su parte”, agregó. Sin dar muchas precisiones sobre cómo se podrían diagramar las listas, Massa indicó que el Frente de Todos “tiene una enorme cantidad de dirigentes que tienen talla para pelear la elección presidencial”.
El trabajo contra la inflación
Horas antes de la transmisión de su entrevista, Massa se reunió con su equipo económico para avanzar con los objetivos planteados para los próximos meses, dentro de los cuales la inflación ocupa un lugar central.
Del encuentro participaron el secretario de Política Económica, Gabriel Rubinstein; el titular de la Secretaría de Hacienda, Raúl Figo; su par de Finanzas, Eduardo Setti; el secretario Legal y Administrativa, Ricardo Casal; el jefe de Gabinete, Leonardo Madcur; el titular del Indec, Marco Lavagna, así como el vicepresidente del Banco Central de la República Argentina, Lisandro Cleri.
Durante la reunión, los funcionarios abordaron cuatro líneas de gestión: en primer lugar, la lucha contra la inflación; en segundo lugar, la estabilización financiera; luego, el ordenamiento del gasto público; por último, la elaboración de un programa de crecimiento de la inversión productiva.