Los recortes de inversión en la obra pública explican buena parte de la búsqueda del déficit cero por parte del gobierno de Mauricio Macri. El ajuste en la inversión para mejorar la calidad de vida de los argentinos se llevó puesto el 45% de los fondos reales durante el primer trimestre del año. En Chubut esa política de desinversión se tradujo en un achicamiento real del 72%.
Según da cuenta el portal de noticias El Extremo Sur, sobre un total de solamente 40 proyectos presupuestados para 2019 en Chubut, durante el primer trimestre estaban en desarrollo apenas 7; todos con un bajísimo nivel de ejecución.
La Asociación Argentina de Presupuesto y Administración Financiera Pública (ASAP) reveló los datos de la Inversión real directa y las transferencias de capital a provincias, ejecutadas durante el primer trimestre de 2019, y por primera vez se los puede comparar con los correspondientes a los dos años anteriores.
Del análisis de los mismos se puede concluir que en todo el país los fondos para la obra pública crecieron de manera nominal en el primer trimestre y por tratarse de un año electoral solamente un 9% respecto de igual período de 2018, pero si se contempla el 54,7% de suba inflacionaria trimestral el resultado real de las inversiones se termina derrumbando 45,7%.
De mal en peor
Un panorama aún peor se había producido en el primer trimestre de 2018, cuando los fondos nacionales en todas las provincias se habían reducido 17,1% de manera nominal. Como consecuencia del 25,4% inflacionario trimestral el achicamiento real fue del 42,5%.
Entre enero y marzo de 2017 la inversión real directa y las transferencias de capital a provincias en todo el país fue de 27.409 millones de pesos, para descender a los 22.733 millones en 2018 y subir apenas a 24.786 millones de pesos en este 2019; es decir 2.623 millones de pesos más que hace tres años. La leve suba de 2019 ni siquiera alcanzó para igualar los fondos de 2017, y a eso se le debe sumar el devastador efecto inflacionario de los dos últimos años.
Sólo en términos nominales el primer trimestre de 2019 cayó 9,5% respecto de igual período del 2017. Si se contemplan las subas inflacionarias el derrumbe de la obra pública nacional asciende a casi el 90%; un panorama que solamente se comprende como parte de brutal ajuste iniciado por el macrismo inclusive antes de la crisis cambiaria del año pasado, luego sustentado por los acuerdos con el Fondo Monetario Internacional que sin duda golpean de lleno las obras de infraestructura.