Un nene de dos años murió este domingo tras ser atropellado en la zona de la cancha Amaya. El conductor conducía una Ford EcoSport y se encontraba descargando bebidas en un salón. Al retirarse del lugar, no habría visto al menor, que se encontraba detrás de la camioneta, y lo embistió.
Si bien trasladó al nene al Hospital Regional, lamentablemente murió. El conductor, identificado como Julián Mamaní, de 45 años, regresó al Hospital horas más tarde y quedó detenido, según informaron fuentes policiales a ADN Sur. La ambulancia “tardó 20 minutos” en llegar al lugar.
Según un testigo, el hombre que lo embistió “fue detrás de la ambulancia con el papá del nene, luego volvió a la cancha a retirar pertenencias y más tarde volvió” al Hospital. Aclaró de esa forma que “el señor nunca se dio a la fuga” sino que “se hizo cargo lo mejor que pudo. Estaba shokeado llorando”.
