Una reciente encuesta realizada por encargo de la compañía de seguros La Caja, analizó datos, hábitos y costumbres del actual escenario vial.
“Hicimos una encuesta a 400 personas, 50% mujeres y 50% varones, de 18 a 60 años, distribuida geográficamente en la zona del AMBA, Mendoza, Córdoba, Tucumán y Río Negro”, le contó a PERFIL Carla Ponce, gerenta de RSE en dicha empresa.
Detalló: “Buscábamos entender el rol de género en la conducción en vía pública y los estereotipos que se perciben en hombres y mujeres”. Y los resultados los sorprendieron por lo concluyentes: “Encontramos que apenas tres de cada diez licencias nuevas emitidas eran para mujeres. Además, si analizamos las licencias profesionales –las que habilitan a manejar equipos pesados, camiones o buses de transporte público–, la estadística es mucho peor: apenas tres de cada mil licencias fueron para chicas”.
Por otra parte, la edad “promedio” en que las mujeres empiezan a conducir supera a la de los varones. De hecho, más de la mitad de los hombres obtiene su licencia alrededor de los 18 años.
“Las mujeres suelen incrementar su uso de vehículos –y por ende, sacar la licencia– cuando están ejerciendo el rol maternal. O sea, entre los 25 y los 45 años, y sobre todo en los niveles económicos más altos”, le explicó a PERFIL Leda Pereyra, socióloga especializada en temas de movilidad y transporte y que actuó como curadora de este estudio de La Caja. Y agregó: “Diferentes estudios muestran que la mujer es, básicamente, usuaria de transporte público y también se mueve caminando. Esta tendencia local es similar a lo que ocurre en otros países de la región e incluso del primer mundo”.
Otro dato llamativo que sostiene Pereyra surge de la Encuesta Nacional de Movilidad Domiciliaria que observó los desplazamientos en auto y que “constató que en el 62% de los casos es una mujer la que va acompañando a un conductor”.
Por otra parte, según la experta, “si en el hogar solo se cuenta con un vehículo, el usuario usual es el varón, ya que este recurso, pese a ser común, suele asignársele al hombre, mientras que la mujer recurre al transporte público, en el que es la principal usuaria”.
Los datos de desigualdad en esta temática se acumulan: según el estudio de La Caja, hoy solo cuatro de cada diez mujeres manejan, mientras que en el caso de los varones ese número se da vuelta: ocho de cada diez conducen.
Otra cifra llamativa que muestra desbalance de géneros se expresa en el uso de motocicletas: en ese tipo de vehículos la presencia de mujeres cae abruptamente: en la geografía del AMBA, las chicas que se desplazan en moto o en ciclomotor representan solo el 14%. La situación mejora algo en Córdoba, donde ellas representan hasta el 30% de los viajes. En otras palabras, es el varón el que sigue siendo el principal usuario de los vehículos de dos ruedas.