El presidente Javier Milei viajará este fin de semana a Brasil, donde compartirá un evento con el ex presidente de ese país Jair Bolsonaro. El encuentro se producirá en la Expocentro de la ciudad de Camboriú, Santa Catarina, que se extenderá dos días, el sábado 6 y el domingo 7 de julio de 2024, en el marco de Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC).
Se dará un día antes de la Cumbre de Presidentes del Mercosur que se hará en Paraguay, a la que Milei desistió de concurrir para no cruzarse con el actual mandatario brasileño,Lula da Silva, con quien está enfrentado y con el que tuvo la semana pasada un duro intercambio de críticas.
El vocero presidencial Manuel Adorni confirmó en la conferencia de prensa matutina que “por cuestiones de agenda no va a ir a la cumbre del Mercosur como tenía previsto días atrás”, para evitar “una sobrecarga en la agenda”. Es que el lunes próximo está previsto el inicio, a la medianoche, de la vigilia previa al Pacto de Mayo, que se firmará en Tucumán. El funcionario, de todos modos, evitó dar una definición sobre el encuentro con Bolsonaro. “El posible encuentro con el ex presidente Jair Bolsonaro no hay ninguna confirmación”, dijo.
De todos modos, el funcionario sí confirmó que el mandatario argentino viajará el sábado al encuentro de la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC), que es la reunión de uno de los grupos de conservadores más grande e influyente del mundo. “Lanzado en 1974, CPAC reúne a cientos de organizaciones conservadoras, miles de activistas, millones de televidentes y los mejores y más brillantes líderes del mundo. En 2023 se celebró en Washington, DC la edición número 50 del CPAC Americano”, informa la página oficial.
Entre los oradores del encuentro que empezará el sábado y concluirá el domingo, participarán como oradores gobernadores, diputados y líderes brasileños, pero también dirigentes de derecha de América Latina, como el mexicano Eduardo Verásategui y el chileno José María Kast.
La decisión de viajar a ver a Bolsonaro agrieta aun más el vínculo entre los presidentes de los principales países del Mercosur.
“Las cosas que yo dije encima son ciertas. ¿Cuáles son los problemas? ¿Que le dije corrupto? ¿Y acaso no fue preso por corrupto? ¿Y qué le dije, comunista? ¿Y acaso no es comunista? ¿Desde cuándo hay que pedir perdón por decir la verdad? ¿O estamos tan enfermos de corrección política que a la izquierda no se le puede decir nada, aún cuando sea verdad?”, afirmó Milei. Fue la reacción a declaraciones previas que había dado el actual mandatario brasileño en televisión abierta.
Lula contó que decidió esquivar a Milei en el G7 de manera deliberada: “No conversé con el presidente de Argentina porque creo que él debe pedirle disculpas a Brasil y a mí. Dijo muchas tonterías. Sólo quiero que él pida disculpas. Yo quiero a Argentina, es un país que me gusta mucho, es un país muy importante para Brasil, y Brasil es muy importante para Argentina. No es un presidente de la República quien va a crear cizaña entre Brasil y Argentina”.