El diputado nacional chubutense recogió la preocupación de operadores y guías de turismo ante la indefinición de la habilitación de vuelos desde el exterior y la aplicación de protocolos sanitarios ante la pandemia. La actividad, clave en la región, se nutre de la llegada de turistas extranjeros.
El diputado nacional Gustavo Menna pidió, a través de un proyecto de resolución, que el Gobierno Nacional tome “medidas urgentes” para garantizar en la Patagonia la temporada de pesca deportiva, una de las actividades turísticas más relevantes y que mayor cantidad de visitantes extranjeros atrae.
El legislador chubutense recogió la profunda preocupación de prestadores y guías que se dedican a la actividad, que ya la temporada pasada no pudo contar con turismo extranjero por las restricciones impuestas por la pandemia del COVID-19. Para la actual, cuyo inicio está previsto en noviembre, Nación no ha dado certezas sobre la autorización de frecuencias ni protocolos de prevención para la llegada de visitantes de otros países.
Preocupación y empleo
El proyecto de resolución presentado este martes en el Congreso recogió datos aportados por las asociaciones de guías de Chubut, Santa Cruz y Neuquén, así como del Parque Nacional Nahuel Huapi, de lodges autoconvocados y operadores independientes.
De acuerdo con esta información, la pesca deportiva genera en forma directa 117 puestos de trabajo anuales, 273 puestos de personal extra por temporada y 216 guías contratados para la práctica de la actividad.
A estos números, dijo Menna, “deben adicionarse empleos indirectos en las ramas gastronómicas, de traslados, venta de insumos en mayoristas y de combustibles, así como en excursiones complementarias, artesanías regionales y comercios locales en general”.
Incertidumbre absoluta
Pese a la trascendencia de la actividad, fundamentó, “a solo tres meses del inicio de la temporada de pesca 2021/2022, y después de un año y medio sin poder operar con el mercado extranjero, existe una incertidumbre absoluta entre los propietarios de establecimientos hoteleros y trabajadores debido a la imposibilidad de tomar reservas, vender paquetes o programar mínimamente la temporada”.
Esta incertidumbre se basa en “no contar con fechas concretas y/o protocolos que permitan el ingreso de extranjeros para realizar esta práctica deportiva que, además, constituye una importantísima fuente de ingresos en la región patagónica”, dijo, y advirtió que “de no revertirse rápidamente, pondrá a la industria en una situación crítica”.
“La pesca deportiva patagónica -enfatizó Menna- posiciona a la Argentina como uno de los destinos turísticos más importante del mundo, en escenarios naturales extraordinarios como el Parque Nacional Los Alerces, declarado patrimonio de la humanidad por la UNESCO”.
Este escenario, manifestó, es “amigable con el medio ambiente y generador de divisas en dólares y de empleos genuinos -directos e indirectos-, a través de una treintena de pequeñas empresas, promotoras de un círculo virtuoso que impacta de manera notable en las economías locales de las provincias del sur de nuestro país”.
Medidas claras y reales
“Los propietarios de establecimientos hoteleros y trabajadores del sector necesitan la adopción urgente de medidas sobre la definición de fechas reales para la habilitación de vuelos e ingreso de extranjeros, el establecimiento de requisitos y/o protocolos claros, y la coordinación de frecuencias y horarios entre los vuelos comerciales de cabotaje y los internacionales de arribo de los pescadores”, indicó.
Consideró, en este contexto, que la actividad “podría admitir -por sus particulares características-, excepciones o permisos especiales mediante el establecimiento de burbujas deportivas para el segmento de la pesca con mosca desde los países de origen hasta las operaciones en los destinos de la Patagonia”.
De esta manera, indicó, “se podría lograr un seguimiento fácil y claro de los movimientos y recorrido de los pescadores extranjeros durante su estadía en el país, cumpliendo con el doble objetivo de prevenir contagios por COVID-19 y de protección de una actividad económica fundamental para la región sur”.
Atención del Estado
En este sentido Menna sostuvo: “El desarrollo y protección de las actividades propias de cada región deviene esencial, y demanda especial atención por parte del Estado”.